El salchichón ibérico es uno de los embutidos más apreciados de nuestra gastronomía. Su sabor único y su calidad dependen no solo del proceso de curación, sino también de la manera en que lo conservamos una vez adquirido. Conservar adecuadamente el salchichón ibérico es fundamental para evitar que pierda sus propiedades organolépticas: sabor, aroma y textura.
Al tratarse de un embutido curado, es más resistente que otros productos frescos, pero necesita ciertas condiciones de almacenamiento para mantener su calidad. Conservar el salchichón ibérico en óptimas condiciones requiere prestar atención a factores clave como la temperatura, la humedad y la ventilación.
Muchos clientes se preguntan cómo conservar chorizo y salchichón de manera efectiva. Pues porque, aunque solemos pensar erróneamente que todo va a la nevera, lo cierto es que NO todos los embutidos son iguales. Es fundamental saber cómo conservar correctamente el embutido en casa.
Disfrutar de nuestros embutidos favoritos, es una tarea fácil, que conocemos y que nos encanta, pero, ¿cuántas veces has dejado un blíster de jamón abierto en la nevera que se ha secado y puesto rancio? Los embutidos tienen un modo de conservarse adecuado para poder seguir disfrutando de todo su sabor, por ello hoy, desde Rodríguez Sacristán, queremos darte unos trucos para que sepas cómo conservar el embutido en casa de forma correcta.
En Jamones Cárdeno, queremos asegurarnos de que disfrutes de nuestros productos ibéricos en su máxima expresión, incluso cuando las temperaturas aumentan. Por eso, ofrecemos una amplia gama de productos envasados que son fáciles de transportar y perfectos para acompañarte en tus viajes, vacaciones y escapadas de verano.
Factores Clave para la Conservación
Temperatura
La temperatura es un factor clave cuando hablamos de cómo conservar el salchichón. Lo ideal es mantenerlo en un lugar fresco y seco, entre 15ºC y 20ºC. Deberás evitar el frigorífico en la medida de lo posible, pues aportaría humedad y la pieza se secaría. Solo usa el frigo cuando la zona en la que se encuentre supere los 25 grados centígrados.
Humedad
El ambiente donde conserves tu salchichón ibérico debe tener una humedad moderada, alrededor del 60-70%.
Ventilación
Al conservar embutidos como el salchichón ibérico y el chorizo, la ventilación es fundamental. Evita almacenarlos en lugares herméticos o con poca circulación de aire.
Luz
Evitar la luz directa: La luz solar o cualquier fuente de luz directa puede alterar la calidad del lomo, haciendo que se oxide o cambie su color y sabor.
Métodos de Conservación
Piezas Enteras
Si has adquirido un salchichón ibérico entero, lo más recomendable es mantenerlo envasado al vacío hasta su degustación; si la pieza está sin envasar, cuélgalo en un lugar fresco, seco y bien ventilado. De esta manera, el embutido seguirá madurando ligeramente y conservará todas sus propiedades.
Si optamos por comprar piezas de Embutido Ibérico completas, se recomienda mantenerlas colgadas evitando que no lleguen a tocarse entre ellas, ya que cada una se distingue por un sabor diferente y particular, el cual, mediante el contacto, podría verse alterado. El espacio donde se cuelguen debe ser un lugar bastante fresco, con temperaturas de entre 15ºC y 20ºC, bien ventilado y sin humedad, de modo que los productos no suden y donde no se vean expuestas a luz solar, en la medida de lo posible.
Normal si te entraron las ganas y decidiste empezarlo. No hay de que preocuparse. 🧴 Truco casero: unta con aceite de oliva virgen extra la zona por donde lo has empezado y cúbrela con papel film. Algo similar sucede con el jamón ibérico. En este caso, la zona empezada se cubre con su propia grasa, con esto se logra mantener la jugosidad de la pieza.
Piezas Cortadas
Una vez cortado, el salchichón ibérico expone su interior al aire, por lo que es crucial conservarlo bien para evitar que se reseque. Otra opción para conservar el salchichón ibérico cortado es utilizar papel film. Este método evita que se reseque y protege su sabor y textura.
Una vez abierto, lo mejor es envolverlo en film transparente en lugar de volver a meterlo en su envase original. Esto se debe a que el film se adhiere mejor a la pieza, preservando su humedad natural y protegiéndolo del aire. Si el lomo ya está cortado en lonchas, lo recomendable es separar las lonchas con papel de horno o film para que no se peguen entre sí y luego envolverlas en papel film.
Si ya hemos abierto el embutido, lo ideal sería consumirlo todo de una vez, pero es algo difícil. Por ello, para conservarlo bien e intentar mantener sus propiedades organolépticas, debemos tapar correctamente la pieza con un papel film y con un trapo para que no se seque rápidamente y conservarla, de igual forma, en un lugar fresco y seco.
Embutidos Loncheados
Si has comprado embutido loncheado sin envasar al vacío, hay que conservarlo en la nevera. Lo ideal es apilar las lonchas y envolverlas correctamente en film transparente. También se pueden conservar en un tupper con cierre hermético. La temperatura a la que guardamos el embutido loncheado debe ser en torno a los 7 grados, por eso, las baldas de la zona superior y central de la nevera, son las más adecuadas. Si se utiliza este método de conservación, hay que destacar dos cosas. En primer lugar, lo ideal sería consumir el embutido en los cuatro primeros días.
Si el embutido que has comprado es loncheado y envasado al vacío, hay que conservarlo en la nevera a una temperatura de entre 5 y 8 grados.
Envasado al Vacío
Según los grandes expertos, el envase al vacío es el método ideal de conservación para los embutidos ibéricos. La técnica de conservación al vacío consiste en extraer todo el aire del envase, prolongando así la vida útil de los alimentos que contiene. La ausencia de oxígeno retrasa el crecimiento bacteriano en carnes crudas, lo que permite que se conserven por más tiempo.
Al estar envasados al vacío, los embutidos no se ven afectados por la “quemadura por congelación”: un fenómeno que se produce cuando los alimentos congelados, envasados de manera inadecuada, pierden humedad en la superficie. Esto ocurre especialmente en la carne y el pescado, que aparecen llenos de escarcha en la superficie, deshidratados y descoloridos.
Si el producto lo has comprado envasado, y cuentas con una máquina de envasar, eres todo un gourmet de los embutidos; envásalos y guárdalos de nuevo en la nevera.
Congelación
Congelar embutidos como el salchichón ibérico no es lo más recomendable, ya que podría alterar la textura y el sabor. Cabe la posibilidad de que te vengas arriba y cortes de más. Son cosas que pueden pasar. Puede que esta pregunta haya merodeado por tu cabeza y la respuesta es que, sí, puedes congelarlo, pero solo si no vas a consumirlo en los próximos días.
En el caso del jamón ibérico, es mejor no congelarlo entero, sino que te recomendamos cortarlo en lonchas finas, envuélvelas en papel film y luego colócalas en una bolsa de congelación. Para conservar embutidos como el lomo, el chorizo, el morcón o el salchichón, lo mejor es hacerlo con la pieza entera. Envuelve cada pieza en papel film y luego en una bolsa de congelación. Asegúrate de extraer la mayor cantidad de aire posible antes de sellar la bolsa.
En este caso, hay diversas opciones. La principal es el uso de aparatos de congelación rápida a una temperatura de entre 18 y 24 grados bajo cero. Si no dispones de esta opción, congela la pieza envasada al vacío sin abrir el envoltorio o envueltas muy bien con papel film. No olvides que has de descongelar cada pieza en la parte superior del frigorífico durante varios días. Así te garantizas que tanto la consistencia como el sabor serán los más adecuados.
Errores Comunes al Conservar Embutidos Ibéricos
- Almacenarlo en bolsas de plástico: Esto puede provocar la aparición de humedad, moho y alterar el sabor del embutido.
- Colocar el salchichón ibérico en lugares expuestos a la luz directa del sol: La luz puede oxidar las grasas y acelerar el proceso de deterioro.
- Guardarlo en la nevera: Como hemos dicho, el lomo no se lleva bien con la nevera.
- No envolverlo en film: Meterlo en su propio envase una vez abierto puede hacer que se reseque y pierda su textura característica.
Consejos Adicionales
- Temperatura ideal: mantén el frigorífico entre 2°C y 5°C.
- Cuidado con los olores: no los pongas junto a alimentos con olores intensos.
- Higiene ante todo: mantén la nevera limpia y libre de líquidos.
- El embutido nunca se debe comer frío, pero tampoco dejar que se caliente.
- No retires la piel de tus embutidos ibéricos hasta el momento de consumirlos. Esta capa natural actúa como aislante y protector, ayudando a conservar su sabor y textura. También puedes usarla para cubrir la zona de corte si la pieza ya ha sido abierta.
- Si las piezas son compradas enteras pero ya están empezadas, lo primordial es evitar que el corte se mantenga en contacto constante con el aire. Existen varias opciones, como conservar la piel o tripa del producto, tapando el corte y no retirarla hasta que sea momento de consumirlo o, en el caso del Jamón Ibérico, para mantener el corte en buen estado, cubrirlo con la propia grasa del Jamón o untar un poco de aceite de oliva en él y taparlo con papel film.
- No apiles los embutidos, lo más común es que tengas diferentes «piezas» de Productos Ibéricos en el frigorífico. Si están envasados al vacío no importa, pero si no, lo ideal es que tengan espacio para que puedan respirar.
Tabla Resumen de Consejos para Conservar Embutidos Ibéricos
| Tipo de Embutido | Método de Conservación | Temperatura Ideal | Humedad Ideal | Recomendaciones Adicionales |
|---|---|---|---|---|
| Salchichón Ibérico Entero | Colgar en lugar fresco y seco o envasado al vacío | 15-20°C | 60-70% | Buena ventilación, evitar luz directa |
| Salchichón Ibérico Cortado | Envolver en papel film | Refrigeración (parte menos fría) | N/A | Consumir en pocos días |
| Embutidos Loncheados | Recipiente hermético en la nevera | 5-7°C | N/A | Consumir en 4 días |
| Embutidos Envasados al Vacío | Refrigeración | 5-8°C | N/A | Sacar del frigorífico antes de consumir para recuperar sabor |
| Embutidos Congelados | Envolver en papel film y bolsa de congelación | -18 a -24°C | N/A | Descongelar lentamente en el frigorífico |
Siguiendo estas recomendaciones, podrás disfrutar del exquisito sabor del jamón ibérico y los embutidos durante todo el verano. En Jamones Cárdeno, nos dedicamos a ofrecerte lo mejor en productos ibéricos para que cada bocado sea una experiencia única.
Si vives en una zona muy calurosa y no tienes acceso a una despensa fresca, podrías considerar conservarlo en la nevera, pero solo en casos extremos. En invierno, el lomo es mucho más fácil de conservar, ya que el ambiente suele ser más fresco.
Tras estas recomendaciones de cómo conservar embutido ibérico creemos que podrás disfrutar en buenas condiciones del aroma, textura y sabor de nuestro embutido ibérico Blázquez. Además, puedes probar el embutido ibérico en deliciosas recetas.
Siempre que conserves tus embutidos en un lugar seco y protegido de la luz directa, podrás mantenerlos fuera de la nevera sin problema. Recuerda que los embutidos ibéricos son productos artesanales y de alta calidad, y como tal, merecen un cuidado especial. Lo ideal es cortar solo lo que vas a comer en el momento.
Consejos para conservar correctamente los embutidos
Esperamos haberte ayudado a conocer cómo conservar tus ibéricos y, sobre todo, a animarte a consumir un producto tan excepcional. Imagínate un plato de salchichón o de chorizo con ese aroma tan peculiar, con las especias más selectas y con esa jugosidad tan característica. ¿A que te apetece? Pues siguiendo nuestra guía vas a poder vivir semejante experiencia en primera persona cualquier día del año. Recuérdalo: frigorífico, papel transparente, una bolsa opaca y mucho mimo. Pon a prueba tu paladar cuando prefieras y disfruta del inconfundible sabor de un embutido fabricado con carne de cerdo ibérico.