El árbol del pan, conocido también como jackfruit, canoa o jacquie, es un árbol originario del subcontinente indio, donde actualmente se cultiva extensamente. Emparentado con el durián y la yaca, el frutipán (Artocarpus altilis) proviene de Oceanía y se cultiva especialmente en las islas del Caribe, aunque también en la Polinesia, Melanesia, Micronesia, América Central, por todo el Pacífico y en el sudeste asiático.
Se trata de la fruta de árbol más grande del mundo, que puede alcanzar hasta 36 kg de peso. Sus frutos amarillos y aromáticos son populares en el sudeste asiático, la India y algunas otras regiones del mundo.
Árbol del pan con frutos.
Nombres Comunes y Características
Con un tamaño de entre 9 a 45 cm de largo y un peso de entre 250 g y 6 kg, al frutipán se le conoce con distintos nombres, como por ejemplo:
- Frutapán en el Caribe
- Árbol del mazapán en Centroamérica
- Pan de dios en el norte de Colombia
- Pan de pobre en Venezuela
- Buenpán en República Dominicana
- Kuru en maorí
- ‘Ulu en Samoa
- ‘Uru en Tahití
- Rimas en Filipinas
El árbol del pan tiene una corteza lisa, de color castaño-grisácea con puntos verrucosos. Presenta una gran escama (estípula) que protege las hojas nuevas, finamente pubescentes por el envés, con nervadura verde-amarillenta. El pecíolo es robusto, verde, de 2,5-5 cm de largo.
Usos Culinarios del Fruto del Pan
El fruto del árbol del pan se utiliza mucho en la industria culinaria. Los dulces frutos amarillos se comen frescos o se convierten en mermeladas, bebidas de frutas o incluso patatas fritas. El jackfruit maduro tiene un sabor dulce que recuerda a una combinación de piña, mango y plátano, y se puede utilizar para hacer postres, pasteles o batidos.
Por otra parte, el jackfruit inmaduro se utiliza como sustituto de la carne en platos asiáticos tradicionales, como el curry tailandés, porque tiene un sabor neutro y puede aromatizarse bien con diversas mezclas de especias. También se utiliza para hacer conservas, mermeladas o incluso fideos de pollo veganos. Las semillas, cocidas o tostadas, se utilizan para preparar platos de sabor similar al de las castañas asadas.
El frutipán puede comerse maduro o verde, crudo o cocinado. Crudo y maduro, el frutipán se parece a la chirimoya en textura, aunque más cremoso, pero también posee un sabor extremadamente dulce. Y cuando se cocina el fruto verde, su sabor y su textura se describe como pan recién horneado, aunque para otras personas también sabe un poco a patata. No es de extrañar que por su gran cantidad de almidón haya sido un alimento básico, como puede ser para nosotros el trigo, en distintas culturas. Allí, se hierve, hornea, brasea, fríe o fermenta para dar lugar a una pasta pegajosa y algo ácida.
Fruta de pan madura y lista para consumir.
Valor Nutricional y Beneficios para la Salud
A parte de ser un alimento muy valorado por su aporte nutricional, el frutipan ha tenido un lugar de especial importancia para la cultura de las distintas islas de Oceanía. Todas las partes del árbol y del fruto se aprovechan, desde el látex hasta las raíces, para tratar distintas dolencias como el asma, la presión sanguínea elevada o la ciática, entre otros. Además, se dice que quemar las flores del árbol del frutipán ahuyenta a los peligrosos mosquitos de la zona.
La fruta de pan es una fuente importante de Vitamina C y en menor medida de Vitamina A, Vitamina B y vitaminas B1, B2 y B3. Posee una alta cantidad de agua, lo que la convierte en una fruta muy hidratante, y también tiene altas cantidades de hidratos de carbono, proteínas y lípidos.
“La fruta del pan es un cultivo básico tradicional de las islas del Pacífico con el potencial de mejorar la seguridad alimentaria mundial y mitigar la diabetes“, dice Murch, profesor de química en la recientemente creada Facultad de Ciencias Irving K. Barber. “Como el primer estudio completo y completamente diseñado de la dieta del fruto del pan, nuestros datos mostraron que una dieta del fruto del pan no impone ningún impacto tóxico”, dice Ying Liu, la estudiante de doctorado que dirigió el estudio.
En general, estos estudios respaldan el uso de la fruta del pan como parte de una dieta sana y nutricionalmente equilibrada. El uso de la fruta del pan es nutritivo y sostenible y podría hacer avances en la sostenibilidad alimentaria de muchas poblaciones a nivel mundial.
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El Árbol del Pan y la Sostenibilidad
El cultivo de esta planta puede hacerse de forma respetuosa con el medio ambiente, con lo que se tiene ya un inicio promisorio. Además de ser un bonito árbol de jardín, sus hojas muertas sirven para fertilizar el suelo, las raíces estabilizan el terreno, entre sus filas se pueden intercalar otros cultivos como ñame, plátanos, jengibre, o kava (este último, Piper methysticum, es un pariente de la planta de la pimienta, Piper nigricum, cuyas raíces se utilizan para producir una bebida sedante.
Jackfruit, o yaca, una especie similar al árbol del pan.
Otros Usos del Árbol del Pan
Los usos del árbol del pan no acaban ahí. La madera ha sido una materia prima tradicional para la construcción de viviendas en la Polinesia y de sus fibras se confeccionaban vestimentas. De la corteza interior se obtienen fibras con varios usos. Tienen diversos usos medicinales. La madera se usa en construcción localmente y en la fabricación de herramientas y canoas.
Se trata de un árbol muy productivo; un solo ejemplar puede producir hasta 700 frutos del pan en un año, según la variedad, la edad, y el hábitat. Cada árbol puede producir unos 150 frutos por año y cada fruto pesa, como se ha comentado, más de 2 kg.
Tabla Comparativa: Fruta del Pan vs. Jaca
Un árbol de la misma familia botánica es la jaca, Artocarpus heterophyllus, que tiene como gran diferencia su tamaño alargado.
| Característica | Fruta del Pan (Artocarpus altilis) | Jaca (Artocarpus heterophyllus) |
|---|---|---|
| Forma del fruto | Redondeado | Oblongo |
| Peso del fruto | Más de 2 kg | Entre 30 y 50 kg |
Historia y Distribución
Para los lectores de novelas de viajes, el árbol del pan o mazapán, como se le conoce en Centroamérica, es una referencia en las zonas tropicales. ¿Cómo viajó este fruto nativo de Oceanía hasta el Caribe? Para explicarlo, debemos remontarnos al siglo XVIII. Los colonos británicos de las islas oceánicas comprendieron rápidamente el alto valor nutritivo del frutipán y decidieron que debían empezar su cultivo en la otra punta del mundo: en el Caribe. ¿Por qué? Pensaron que su alto aporte en proteínas e hidratos de carbono sería un alimento ideal para los esclavos que trabajaban en las plantaciones de las Antillas.
Precisamente, en aquella época, el frutipán protagonizó un motín. En 1787 la Marina Real Británica ordenó que el navío HMAV Bounty recogiera el frutipan en Tahití y lo transportara hasta el Caribe. Aquella empresa fue comandada por William Bligh, que no cayó en gracia entre la tripulación por su funesto lideraje.
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