En el embarazo, los cambios hormonales y fisiológicos hacen necesario llevar una alimentación sana y estar bien hidratada. Se recomienda aumentar la cantidad de líquido que se ingiere, hasta unos tres litros al día. Pero, ¿qué líquidos te conviene tomar y cuáles debes evitar?
Aunque es una opción más saludable que otras bebidas industriales, la realidad es que su consumo diario puede tener consecuencias para nuestra salud. De hecho, en 2023 cada español consumió una media de 7 litros de este tipo de refrescos. Y es que, frente a otros productos como la Coca-Cola normal o las bebidas alcohólicas, esta es una de las opciones más saludables que se pueden consumir.
Si revisamos las bebidas recomendadas durante el embarazo, nos daremos cuenta de que la Coca-Cola no se encuentra en la lista. Una de las razones es que, durante el embarazo, necesitamos consumir alimentos y bebidas lo más saludables y nutritivas posibles.
Al verificar los datos del Departamento de Agricultura de EE.UU., observamos que la Coca-Cola contiene principalmente agua, azúcar y sodio. También incluye otros ingredientes que, en lugar de aportar nutrientes, pueden resultar perjudiciales.
Por tanto, es mejor evitar la Coca-Cola durante el embarazo. Existen otras bebidas que pueden sustituirla sin representar ningún riesgo.
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¿Por qué evitar la Coca-Cola en el embarazo?
La Coca-Cola es hoy en día la bebida estadounidense más reconocida, popular y ampliamente distribuida en todo el mundo. Sin embargo, esto no implica que sea la opción más adecuada para la dieta de una mujer embarazada.
Analicemos cada uno de sus ingredientes para entender por qué es preferible evitar el consumo de Coca-Cola durante el embarazo.
Ingredientes de la Coca-Cola
Su fórmula original ha estado guardada durante muchos años, pero estos son los ingredientes que se encuentran en su etiqueta y están registrados:
- Agua carbonatada: El agua con gas es la base para la producción de Coca-Cola y constituye el 90 % de la bebida en su totalidad.
- Azúcar: La tabla del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés) revela que 100 mililitros de Coca-Cola contienen 11 gramos de azúcar, que proviene de la remolacha azucarera, la caña de azúcar o el jarabe de maíz rico en fructosa. Esto significa que una lata de 330 mililitros aporta 36 gramos, lo que equivale a 145 calorías.
- Cafeína: Un ingrediente original de la Coca-Cola es la nuez de cola, una planta que se utiliza para evitar el sueño. Sin embargo, se cree que en la actualidad, este ingrediente ya no se utiliza. En su lugar, se añade la cafeína por separado y se utilizan imitaciones de la nuez de cola. Una lata de 330 mililitros aporta 40 miligramos de cafeína.
- Ácido fosfórico: El ácido fosfórico se utiliza para acidificar la Coca-Cola. Sin embargo, la presencia de este ácido puede propiciar la formación de cálculos renales, lo que podría comprometer la función renal de una mujer embarazada.
- Colorante de caramelo (E150D): Es simplemente un colorante de color caramelo, en concreto de caramelo de sulfito de amoníaco, apto para el consumo humano.
- Extractos naturales de plantas: Análisis de muestras de Coca-Cola han revelado la presencia de varios extractos de origen vegetal, como vainilla, nuez moscada, cítricos, lavanda, canela y extracto de coca.
Además, este tipo de bebidas puede generar una dependencia psicológica o un hábito difícil de romper en algunas personas.
La cafeína: un estimulante presente en la Coca-Cola Zero que, aunque en cantidades moderadas, puede generar cierta tolerancia y deseo de consumo regular.
El sabor dulce -aunque no provenga del azúcar- estimula los centros de recompensa del cerebro, lo que refuerza la conducta de consumo.
Por todo ello, la mejor opción sigue siendo el agua. Las bebidas como la Coca-Cola Zero deberían reservarse para momentos puntuales y no como parte de la rutina diaria.
Riesgos asociados al consumo de Coca-Cola durante el embarazo
Es posible que una lata de Coca-Cola te parezca inofensiva como opción para satisfacer un antojo durante el embarazo. Sin embargo, es importante tener en cuenta que su consumo puede poner en riesgo la salud y el desarrollo del bebé. Por lo tanto, es aconsejable optar por bebidas más saludables como alternativa.
- Alto consumo de azúcar: Puede provocar un aumento de peso durante el embarazo y el desarrollo de complicaciones como preeclampsia, parto prematuro y diabetes gestacional. Las evidencias analizadas también revelan que el bebé puede nacer con trastornos en el metabolismo, alteraciones en la percepción del gusto y tener un mayor riesgo de obesidad al nacer y durante la infancia.
- Cafeína: Aunque el aporte de cafeína de una lata de Coca-Cola no parece excesivo, contribuye al total diario de cafeína en la dieta, al igual que lo hacen el café, el té y el chocolate. La American Pregnancy Association recomienda limitar la ingesta de cafeína a menos de 200 miligramos al día durante el embarazo.
- Ácido fosfórico: La presencia de este ácido puede propiciar la formación de cálculos renales, lo que podría comprometer la función renal de una mujer embarazada. Por otro lado, el ácido fosfórico también puede unirse al calcio e interferir en su absorción.
¿Y qué ocurre con las otras versiones de Coca-Cola bajas en azúcar?
Estas versiones de Coca-Cola son elaboradas con edulcorantes artificiales, como el aspartamo y el acesulfame-K, con el fin de reducir las calorías. Sin embargo, también se ha observado que pueden llevar al aumento de peso tanto en la madre como en el bebé, lo que podría aumentar el riesgo de obesidad en la vida adulta de este último.
Por lo tanto, se necesitan más investigaciones en este ámbito para proporcionar recomendaciones dietéticas más sólidas. Mientras tanto, se aconseja a las embarazadas que eviten abusar del consumo de estos edulcorantes como medida de precaución.
Alternativas a la Coca-Cola durante el embarazo
Si tienes un antojo de Coca-Cola en el embarazo, ¿qué otra bebida puedes tomar? Son varias las bebidas que pueden satisfacer el deseo de tomar una lata de Coca-Cola, en especial aquellas recomendadas por tu médico o nutricionista para mantenerte bien hidratada. Es preferible no tomar riesgos y evitar la Coca-Cola en el embarazo.
Aquí hay algunas alternativas saludables:
- Agua: En el embarazo, según recomienda la doctora Soledad Peco, ginecóloga del Hospital Nuestra Señora del Rosario, se deben tomar tres litros de líquido al día, sobre todo en verano, especialmente agua. Asimismo, hay que tener en cuenta que, durante el embarazo, se recomienda beber un litro y medio de agua al día para que estés bien hidratada. Agua mineral natural Solán de Cabras es ideal para acompañar a la mujer en las etapas más importantes de su vida gracias a que es un agua de mineralización débil.
- Leche: Es una bebida especialmente recomendada para las futuras mamás por su alto contenido en calcio y proteínas.
- Zumos de frutas: Al igual que la leche, el zumo sin pasteurizar puede contener bacterias dañinas procedentes de las frutas y verduras crudas que se expriman para hacer el zumo.
- Infusiones y té: Puedes tomarlos, eso sí, con moderación. Hay que intentar evitar el exceso de cafeína y teína, pero pueden tomarse con moderación, afirma la ginecóloga. “De hecho, en el verano baja la tensión y en las mujeres embarazadas más aún, por lo que recomendamos tomar alguna bebida refrescante con azúcar y cafeína para mejorar la clínica de malestar asociada a la tensión baja, como los refrescos de cola”.
- Caldos: En general, durante el embarazo, sí que se puede beber Nestea. Por tanto, antes de consumir algún tipo de producto Nestea en el embarazo, es muy importante leer atentamente la etiqueta del mismo para conocer los ingredientes y saber si contiene cafeína.
Tabla de bebidas y su contenido de cafeína (aproximado):
| Bebida | Contenido de cafeína (mg) |
|---|---|
| Coca-Cola (330 ml) | 40 |
| Café (1 taza, 12 onzas) | 95-200 |
| Té negro (1 taza) | 47 |
| Chocolate negro (30g) | 22 |
Coca-Cola Zero: ¿Una alternativa más segura?
Seguro que has oído que la Coca-Cola Zero es la peor de todas, una creencia que se ha difundido sin parar. Es hora de arrojar luz sobre este popular producto sin azúcar. Aunque lo ideal sería evitar endulzantes para superar la adicción al azúcar, es una tarea complicada, especialmente para los diabéticos que buscan un capricho dulce sin comprometer su salud.
Algunos dicen que la Coca-Cola Zero es menos sana que la versión azucarada debido a sus productos químicos, considerados potencialmente cancerígenos, pero estas afirmaciones a menudo carecen de fundamento y se basan en rumores.
Diferencias entre Coca-Cola normal y Coca-Cola Zero
La Coca-Cola clásica está compuesta por agua carbonada, azúcar, colorante negro (E150D), acidulante (E338) y aromas naturales, pero para la Coca-Cola zero sustituyen el azúcar por edulcorantes: ciclamato sódico (E952), acesulfamo-K (E950) y aspartamo, además de añadir un corrector de acidez (E331).
Ingredientes de la Coca-Cola Zero
- Ciclamato sódico (E952): Se utiliza como edulcorante artificial desde 1950, ya que no tiene calorías y endulza más de 50 veces comparado con otros edulcorantes. Su ingesta diaria admisible está considerada por las autoridades sanitarias en 11mg por cada kg de peso corporal al día.
- Acesulfamo potásico (E950): Es un edulcorante sintético que endulza unas 200 veces más que el azúcar. Su ingesta diaria admisible es de 15mg por kg de peso corporal.
- Aspartamo: Al igual que los anteriores compuestos, se trata de un edulcorante no calórico que es entre 150 y 200 veces más dulce que el azúcar. La FDA marca una ingesta diaria segura en 50 mg/kg.
- Acidulante (E338): Este aditivo es el ácido fosfórico y suele utilizarse para conferir cierta acidez a la bebida. Se ha sugerido que su ingesta habitual favorece la erosión del esmalte dental.
- Colorante negro (E150D): Es simplemente un colorante de color caramelo, en concreto de caramelo de sulfito de amoníaco, apto para el consumo humano.
- Corrector de acidez (E331): La última diferencia entre Coca-Cola Zero y normal es el corrector de acidez (citrato de sodio) que presenta la primera y no la segunda.
¿Puedo tomar Coca-Cola Zero si estoy a dieta?
Puedes beber Coca-Cola Zero si estás a dieta, ya que no contiene calorías ni azúcar, lo que la hace una opción adecuada para satisfacer tus antojos de bebidas carbonatadas sin afectar tu ingesta calórica. Esto puede hacer que seguir una dieta sea más llevadero, permitiéndote disfrutar de un sabor dulce sin comprometer tus objetivos de pérdida de peso.
Sin embargo, es importante no basar tu dieta únicamente en bebidas sin calorías. Una alimentación equilibrada, rica en frutas, verduras, proteínas y granos enteros, es esencial para una pérdida de peso efectiva y una buena salud. Disfruta de la Coca-Cola Zero con moderación y complementa tu dieta con alimentos nutritivos y ejercicio regular.
En resumen, aunque a simple vista una lata de Coca-Cola pueda parecer inofensiva, algunos de sus componentes pueden tener un impacto en la salud tanto de la madre como del bebé. Por lo tanto, es importante no exponerse a riesgos innecesarios y priorizar la hidratación con agua pura y otras bebidas elaboradas a partir de ingredientes naturales.