Nueva York es una de las ciudades más conocidas por sus clubs de jazz. No es de extrañar, ya que los mejores artistas siempre intentan llegar a Nueva York para curtirse y llegar lo más lejos posible. Cuando hablamos de sitios para disfrutar de una velada con jazz en directo hay muchas opciones, desde lo más turístico hasta bares escondidos con artistas más experimentales.
5 Jazz Clubs for Unwinding in New York City
La Historia y Evolución del Jazz en Nueva York
La historia del jazz en Nueva York es rica y diversa, comenzando en el siglo XX cuando artistas afroamericanos llevaron ritmos de blues y ragtime a los clubes locales. Durante la década de 1930, el swing dominó la escena, y lugares emblemáticos como el Cotton Club se convirtieron en hitos culturales. Con el tiempo, el bebop emergió en la década de 1940, representando una evolución hacia un estilo más complejo e improvisado. Hoy, clubes como el Village Vanguard y el Blue Note son testigos de esta evolución, ofreciendo espacios donde los géneros siguen fusionándose y reinventándose.
En Nueva York, Harlem jugó un papel muy importante en el nacimiento y el desarrollo del jazz. Durante los años 20, Lennox Avenue y Seventh Avenue en Harlem contaban con al menos 20 clubs de jazz. Billie Holiday fue descubierta aquí cuando tenía 17 años. Greenwich Village, donde se encuentran la mayoría de clubs de jazz en la actualidad, es también conocido como uno de los lugares de referencia de la escena jazz. Muchos residentes de “The Village” eran conocidos por sus actitudes progresistas y el área ha sido el lugar de gestación de muchos movimientos políticos y culturales.
El jazz en Nueva York no es solo música, es un refugio para las emociones y la expresión artística. Cada club ofrece una experiencia única que despierta la pasión y la creatividad.
Clubs de Jazz Emblemáticos en Nueva York
Cuando era estudiante en la Universidad de Columbia pasaba por delante de este local cada mañana camino a la biblioteca. Smoke Jazz es un bar/restaurante que lleva desde 1976 en el mismo lugar. Antes se llamaba Augie’s Jazz, pero los nuevos dueños cambiaron el nombre manteniendo el mismo espíritu de jazz con buena comida y bebida. Sugerimos ir a cenar aquí entre semana o si tienes más tiempo tomar el brunch con pollo frito y gofres que cada domingo tienen entre las 11-16h.
No te voy a mentir, lo que me atrajo a este club de jazz no fue la música tanto como la comida, que viene de una de las mejores cocinas de comida barbacoa en Nueva York (en mi opinión), Blue Smoke BBQ. Es la oportunidad perfecta para combinar la gastronomía americana con una noche de jazz. El espacio está muy bien con buen sonido y suelen tener bastante buenos músicos según la fecha.
Crecí escuchando de este sitio en los programas de radio de mis padres; “live from the Village Vanguard” decían siempre para introducir la próxima canción. Es un sitio icónico en Nueva York y no ha cambiado casi nada a lo largo de los años. Hay fotos de los músicos que han tocado allí y al bajar las escaleras encontrarás pequeñas mesas para tomar una consumición durante el concierto. Dicen que ahora es más turístico, pero los domingos tienen músicos que sólo están en Nueva York durante un par de días, así que viene mucha gente local.
Puede que no sea el más bonito, pero este sencillo club de jazz en el West Village siempre tiene tríos y cuartetos de músicos que tocan hasta la madrugada. El sitio fue fundado en 1994 con la idea de crear un ambiente que apoyara la música jazz y su cultura. Graban cada concierto para poder preservar la historia del lugar y tienen más de 9.000 grabaciones hasta la fecha.
En Dizzy’s Club no vas a tener el ambiente de un club de jazz típico con las luces bajas y la entrada escondida. A cambio podrás disfrutar de los mejores músicos actuales, como por ejemplo el gran trompetista Wynton Marsalis. Es parte de Lincoln Center y las vistas de Columbus Circle no decepcionan.
Otro club de jazz en la zona cerca de Times Square es Birdland, que a lo mejor os suena por su larga historia - el nombre viene del famosísimo músico, Charlie Parker y su apodo “Bird.” Durante los años 50 y 60 el club estaba en la calle 52 siendo la cuna del jazz en Nueva York. También tuvo un local en la zona del Upper West Side donde músicos como John Coltrane o George Shearing eran regulares; de aquí viene la canción “Lullaby at Birdland». Hoy en día el club ha vuelto a la zona de Midtown y es conocido por sus “bandas en residencia” como por ejemplo la orquesta de jazz afro-cubano de chico O’Farrill que toca cada domingo. También tienen músicos geniales como Joe Lovano o Kurt Elling.
Si buscas el jazz más progresivo e innovador tienes que ir al Jazz Gallery en la zona del Flatiron (antes se encontraba en la zona de Soho). Tiene un espacio que parece más una galería de arte que un escenario de conciertos. Tienen cuatro programas: Jazz del Siglo XXI con artistas conocidos y otros que están empezando, residencias para que los nuevos compositores tengan una nueva oportunidad, un programa de mentores donde un veterano y un músico joven trabajan juntos y el “Woodshed” que provee un espacio de ensayo para los artistas de jazz en Nueva York.
Este bar se encuentra en el West Village, en la planta sótano de un edificio en Christopher Street. Lo que más me gusta del local son el ambiente de “speakeasy” (un bar de la época de la prohibición de alcohol en los años 20 de los EE.UU.) y el precio; la primera actuación de la noche es gratuita y la segunda no suele costar más de $10. Es una opción más económica para los que quieren disfrutar del ambiente del jazz sin tener que pagar mucho dinero.
Vale, este sitio realmente es un restaurante con comida fresca del centro de europa y cervezas locales, pero cada martes desde hace casi 10 años tienen conciertos de jazz por la noche. Se encuentra en el barrio de Park Slope en Brooklyn, así que puedes aprovechar para conocer otra zona de la ciudad. Hay dos actuaciones, una a las 21h y otra a las 22:30h. Tienes que pagar unos $10 además de consumir mínimamente $10 en el restaurante. En cuanto a la música tienen un poco de todo, desde artistas jóvenes a otros más conocidos. Suele ser jazz “progresivo” y de comer recomendamos la hamburguesa “frita.” Es un pan húngaro que envuelve una hamburguesa con mostaza y beicon orgánico y luego frito.
Músicos Destacados
Músico tenaz y hecho a sí mismo. Un luchador como pocos, que fue capaz de cambiar las normas de la prestigiosa Berklee College of Music, además de crear una nueva técnica para el acordeón llamada aproximación de acorde en ambas manos. Trabajó de ayudante de camarero en Boston y sobrevivió en la gran manzana hasta conseguir el reconocimiento de artistas consagrados como Maria Schnneider, Arturo O’Farrill, Jeff Ballard, Chris Cheek, Paquito D’Rivera y Donny McCaslin, entre otros. Hoy es un asiduo de los clubs neoyorkinos por derecho propio.
Víctor Prieto
Víctor Prieto: Realmente, mi intención era venir a Nueva York por unos años, hacer muchos contactos y después regresar a España. Pero al pasar los meses me fui dando cuenta del nivel musical que iba adquiriendo y que no había ningún acordeonista que pudiera tocar lo mismo que estaba haciendo yo. Esto me dio más fuerzas para luchar y me motivó para seguir adelante.
Víctor Prieto: El jazz manouche es un estilo precioso que puedo tocar muy bien. No es uno de mis favoritos, pero es un estilo donde este instrumento puede hacer el papel de una guitarra acompañada, y realizar solos de una forma tradicional. Es un estilo fantástico, utilizado dentro del jazz francés, que me gusta mucho. Pero mi modo de tocar es una mezcla de acordeón, saxofón, piano y guitarra.
Víctor Prieto: Creo que pocos músicos en Nueva York viven sólo de tocar un estilo de música. En mi caso, tengo que recurrir a estilos que son necesarios para cualquier acordeonista, ya sea tango, klezmer, música brasileña, celta o española. Cuando me refiero al tango, digo que es necesario conocer en profundidad las claves, el vocabulario, los patrones rítmicos, etc. Lo mismo sucede con los otros estilos. En realidad, vivir de la música y del jazz en Nueva York es muy difícil, ya que la competencia y el nivel musical son altísimos.
Víctor Prieto: Primero me interesé por el blues, ya que me encanta la progresión armónica y de ahí pasé al jazz escuchando a John Coltrane, Chick Corea, Miles Davis y Herbie Hancock.
Víctor Prieto: Se trata de una técnica que consiste en usar poliacordes, dos acordes diferentes tocados al mismo tiempo. Esta técnica crea sonidos y texturas armónicas no usadas anteriormente y hay que moverlos a intervalos como un pianista. Ello me obligó a cambiar toda la digitación e inventar una nueva para la mano izquierda del acordeón.
Víctor Prieto: El acordeón clásico es una carrera larga de quince años y el nivel que hay en España es altamente competitivo, aunque tuve la suerte de contar con el profesor Daniel Rodríguez Meirinho durante unos diez años. A su lado estudié las “Sonatas” de Scarlatti y Bach; la “Sonatina Piccola” de Torbjorn Lundquist; La “Ciaccona” de J.
Víctor Prieto: Se sufre mucho al estar lejos de tu familia en un país que no es el tuyo. Cuando llegué a Nueva York no tenía a nadie que me pudiera echar una mano. Tener que buscarse la vida así es realmente difícil; además, estar obligado a renovar el visado de artista cada dos años con los gastos que esto supone en abogados era otra dificultad añadida. Al principio, trabajar como músico era imposible, así que tuve que hacerlo de ayudante de camarero para poder sobrevivir. Pero también hay que decir que es una experiencia fenomenal y tampoco es que uno esté llorando todos los días.
Víctor Prieto: Al principio en Berklee me dieron la mitad de la beca ya que no me querían aceptar, puesto que el acordeón no es está en la lista de instrumentos que se imparten allí. Mi tenacidad me llevó finalmente a luchar contra el sistema de Berklee y a estudiar acordeón de jazz, aunque tuve que demostrar que podía hacerlo sin la ayuda de profesor alguno.
Víctor Prieto: Llevo veintisiete años fuera de España, doce en Venezuela donde me crié y quince en los USA. ¡Ahora dime de dónde soy!
Víctor Prieto: Yo diría que muy poco o casi nada.
Víctor Prieto: Me encanta la gaita gallega, y soy un fan completo de la música gallega.
Víctor Prieto: Hay una mayor demanda de acordeón y esto se nota en que cada día se está popularizando más. Ahora mismo estoy inmerso en siete proyectos diferentes como sideman, además de los míos como leader.
Víctor Prieto: Tanto Carlo como Allison son músicos que pertenecen a la escena de jazz de Nueva York desde hace bastantes años, ellos formaron parte de la primera formación de mi trío, concretamente en el 2003 en NY. Son músicos que tocan con un sinfín de artistas, como Ray Barreto, Ravi Colrane, John Scofield, Arturo O’Farrill, Dr.
Víctor Prieto: La música de este proyecto está llena de intensidades y colores, sobre todo en el directo y el público siempre se queda fascinado. Chris Cheek es uno de mis saxofonistas preferidos, tenemos muy buena amistad y eso se refleja a la hora de tocar.
Víctor Prieto: Ha sido muy buena experiencia poder tocar con la big band de Maria durante casi tres años. Es una persona maravillosa, su música es preciosa, las composiciones y su modo de arreglar es impresionante. Los músicos de la big band son la cream de la cream del jazz internacional.
Víctor Prieto: El Dizzy Coca-Cola Club, en NYC, donde toqué toda una semana con mi trío.
Víctor Prieto: Con mi trío voy a visitar Chicago, Texas y Los Angeles, más las actuaciones en el Estado de Nueva York en Shape Shifter Lab, Terraza 7 y el City Winery World Festival. Además de esto, tengo dos giras con Cristina Pato en septiembre de 2013 y abril de 2014; una gira con Chris Howes en septiembre y noviembre de 2013. También tengo prevista una grabación en Jazz Standard NY con Emilio Solla y la gira de 2014.
Tabla Resumen de Clubs de Jazz
| Club de Jazz | Ubicación | Características Destacadas |
|---|---|---|
| Smoke Jazz & Supper Club | Upper West Side | Jazz con buena comida, brunch dominical. |
| Village Vanguard | Greenwich Village | Sitio icónico con fotos de músicos famosos. |
| Smalls Jazz Club | Greenwich Village | Ambiente underground, talentos emergentes. |
| Dizzy's Club Coca-Cola | Columbus Circle | Vistas impresionantes, músicos de renombre. |
| Birdland | Midtown | Bandas en residencia, historia rica. |
| The Jazz Gallery | Flatiron District | Jazz progresivo e innovador. |