El repollo, también conocido como col, es una verdura versátil y nutritiva que puede ser un ingrediente estrella en una variedad de platos. Existen diversas variedades de repollo, cada una con sus propias características y usos culinarios. En este artículo, exploraremos los diferentes tipos de repollo, cómo prepararlos y cocinarlos, y te daremos algunas recetas deliciosas para que disfrutes de esta verdura al máximo.
Tipos de Repollo
El repollo o col tiene varias variedades y, es, de hecho, parte de una familia más grande conocida como las brassicas, que incluye la coliflor y el kale. Las variedades más fácilmente disponibles son:
- Repollo morado o lombarda: Tiene hojas firmes, apretadas y brillantes de color púrpura.
- Repollo blanco: Tiene una textura similar al rojo pero con hojas muy pálidas y un sabor más dulce.
- Repollo rizado o col de Saboya: Tiene hojas arrugadas y onduladas en los bordes, que se aclaran hacia el centro.
- Berza: Tiene hojas más suaves que forman más una punta en lugar de una forma redonda.
- Col picuda o hispi: (también conocido como repollo dulce) es un repollo verde más dulce y tierno, con forma puntiaguda.
Todos son extremadamente versátiles: se pueden servir crudos en ensaladas como coleslaw o ensalada de col, pero también se pueden cocinar rápidamente, como en salteados, simplemente al vapor e incluso cocidos a fuego lento, o en sopas y guisos.
Cómo Preparar el Repollo
Hay dos maneras de preparar el repollo, dependiendo de cuántos quieras servir y cómo quieras cocinarlo:
Para servir a un número reducido de personas, o para recetas en las que necesites mantener las hojas enteras:
Lo mejor es pelar las hojas individualmente, coger lo que necesites y luego poner el resto del repollo de nuevo en el refrigerador, envuelto. Luego puedes usar estas hojas enteras o picarlas según sea necesario.
Dependiendo de la antigüedad del repollo, quizá tengas que deshacerte de las hojas exteriores si están magulladas, manchadas o dañadas. Si no son útiles para el caldo, ponlas en el compost.
La vena central de cada hoja es dura, particularmente en las hojas exteriores, así es mejor retirarla, especialmente si quieres cocinar el repollo rápidamente ya que esta parte es muy densa y tardará mucho en cocinarse.
Para servir a un grupo más grande:
Corta el repollo por la mitad o en cuartos, colócalo con el lado cortado hacia abajo en una tabla y pica o desmenuza las hojas.
Para repollos más firmes, como los morados o blancos, corta primero la parte dura del tallo o el núcleo.
Métodos de Cocción del Repollo
El repollo se puede cocinar de diversas maneras, cada una resaltando diferentes aspectos de su sabor y textura:
- Al vapor: Ideal para repollo rizado o col de Saboya.
- Hervido: Apto para todos los tipos de repollo.
- Blanqueado: Preparación previa para saltear o freír.
- Salteado: Perfecto para todos los tipos de repollo.
- Braseado: Recomendado para lombarda y repollo blanco.
Cómo cocinar el repollo al vapor
Mejor para: berza, repollo rizado o col de Saboya
Pon tu repollo preparado y desmenuzado en una olla adecuada y cocínalo al vapor durante 5 minutos o hasta que esté tierno.
Cómo hervir el repollo
Mejor para: todos los tipos de repollo
Pon las hojas de repollo o el repollo desmenuzado en una cacerola grande y cubre hasta la mitad con agua. Lleva a ebullición y cocina durante 3 a 5 minutos o hasta que esté tierno. A menudo, este paso continúa blanqueando la verdura (ver el siguiente punto).
Cómo blanquear el repollo
Mejor para: todos los tipos de repollo
Para blanquear (para que las hojas puedan saltearse o freírse más tarde), cubre con agua y hierve durante 3 minutos. Transfiere las hojas a agua fría para refrescarlas.
Cómo freír el repollo
Mejor para: todos los tipos de repollo
Desmenuza las hojas de medio repollo, eliminando cualquier tallo de hoja duro. Calienta 2 cucharadas de aceite vegetal en un wok, luego añade el repollo y 2 dientes de ajo en rodajas. Sofríe hasta que el repollo comience a ablandarse, luego añade 75 ml de caldo de verduras. Cubre y cocina durante 3 minutos hasta que esté tierno.
Cómo brasear el repollo
Mejor para: lombarda, repollo blanco
Corta finamente 1 cebolla grande y ponla junto con 50g de mantequilla o 50ml de aceite de oliva en una cacerola resistente al fuego. Fríe la cebolla a fuego medio, revolviendo frecuentemente, durante 5 minutos. Corta el núcleo de un repollo de 750g y corta finamente las hojas. Añade esto a la cacerola y mezcla todo, cocinando a fuego lento mientras pelas y cortas 1 manzana. Tritura 1 cucharadita de bayas de enebro y 1 de semillas de alcaravea, luego añade estas y las rodajas de manzana a la sartén. Sazona y vierte 500 ml de sidra, vino tinto o agua. Remueve bien y lleva a hervir a fuego lento, cubre la cacerola y cocina durante 20 minutos.
Las hojas de repollo enteras pueden usarse rellenas, enrolladas y horneadas. El repollo desmenuzado se puede encurtir o fermentar para hacer chucrut o kimchi.
Recetas Deliciosas con Repollo
El repollo es muy versátil, no sólo en las técnica de cocción, sino en su finalidad. Ya sea frito, braseado o cocido, puede servir como una estupenda guarnición o como un plato principal. Se lleva muy bien con las legumbras y con la carne, especialmente la de cerdo.
SALTADO DE COL | SALTADO DE REPOLLO | RECETA PERUANA
Receta básica de repollo salteado
Para 6 personas
Ingredientes:
- 1 repollo
- 4 cucharadas de aceite de oliva
- 4 chalotas, picadas
- 1 ramita de romero
- 2 dientes de ajo pelados
Método:
- Corta el repollo en cuartos, quita el núcleo y desmenuza las hojas.
- Blanquéalo en una cacerola con agua hirviendo con sal durante 3 minutos, luego ponlo bajo el grifo de agua fría para enfriar. Escurre bien.
- Calienta la grasa en una sartén y fríe las chalotas, la ramita de romero y los dientes de ajo durante 5 minutos hasta que estén dorados.
- Descarta el ajo y el romero, añade el repollo, salteando hasta que se recaliente. Sazona y sirve.
Otras maneras de servir el repollo
Aquí tienes 5 deliciosas recetas para hacerte fan para siempre del repollo y de sus variedades.
- Repollo salteado con tocino: Con un toque un poco de crujiente es una guarnición que nunca falla o también como plato único ligero.
- Sopa de repollo: Es deliciosa con virutas de parmesano, o servida con un trozo de pan crujiente con mantequilla.
- Ensalada de repollo clásica: Se hace en 15 minutos y se toma bastante fría para esos días cuando aprieta el calor, bien sola o para acompañar platos de carne o hamburguesas.
- Repollo crujiente frito: Otra clásica guarnición que proviene del recetario chino y muy fácil de hacer.
- Col picuda en salsa romesco: La col picuda es más blanda y dulce que es resto de los integrantes de su familia, perfecta para poner a la parrilla. Esta es una receta perfecta para la cena de una noche de semana o los fines de semana en los que quieres preparar algo sabroso sin pasar demasiado tiempo en la cocina.
Información nutricional del repollo
El repollo proporciona fibra y otros nutrientes como el potasio y la vitamina K, lo que la convierte en un gran complemento para un estilo de vida saludable.
| Nutriente | Cantidad por taza (picado, crudo) |
|---|---|
| Calorías | 22 kcal |
| Grasa | 0.1 g |
| Carbohidratos | 5.2 g |
| Fibra | 2.2 g |
| Proteína | 1.1 g |
| Vitamina C | 32.6 mg |
| Vitamina K | 67.6 mcg |
La verdura no es una fuente importante de proteínas y es básicamente un alimento sin grasa. Contiene un alto contenido de vitamina C, y esto se potencia, cuando está fermentada, por lo tanto es la verdura de invierno ideal.
En el caso de la vitamina K, ofrece unos 67,6 mcg por porción. Esto colabora para mantener los huesos fuertes y ayuda a curar las heridas.
La Academia de Nutrición y Dietética recomienda el consumo de repollo y otras verduras crucíferas, para optimizar la función cognitiva y ralentizar el deterioro con la edad. Los niveles de memoria y alerta se pueden mejorar con una buena nutrición.