Hoy compartimos una receta sencilla y deliciosa: unas rosquillas fritas de naranja con aroma a casa de la abuela y sabor a merienda de toda la vida. Con pocos ingredientes y un toque cítrico, son ideales para acompañar un café, un chocolate caliente o ¡para comértelas directamente de la fuente!
Los roscos fritos son los dulces que toda abuela prepara cuando se acerca alguna fecha especial, ya sea navideña, del Día de Todos los Santos o Carnavales. Son muy sencillas de hacer y gustan siempre a toda la familia. ¡Apunta la receta y prepárala tú también en casa!
Los roscos fritos son otro de los dulces que no debería faltar entre las recetas de Navidad. Unos dulces tradicionales que te teletransportarán a la infancia en un simple mordisco. ¡Atrévete con un clásico irresistible que a todos gusta!
En este artículo te enseñaremos a preparar una deliciosa receta de rosquillas fritas. A simple vista podría parecer que hacer este dulce es complicado pero nada más lejos de realidad. Es una receta realmente sencilla.
Ingredientes para unas roscas fritas extremeñas caseras (para 4 personas)
- 1 kg de harina de trigo (de repostería)
- 3 huevos grandes
- 250 ml de leche
- Ralladura de media naranja
- Ralladura de medio limón
- 1 sobre de levadura química
- 10 cucharadas de aceite de oliva suave
- 250 gr de azúcar
- Azúcar para rebozar las rosquillas
- Aceite para freír las rosquillas
Preparación paso a paso
- En primer lugar, echamos la harina junto con el sobre de levadura en un bol grande.
- Batimos los huevos y los mezclamos con el azúcar, el aceite de oliva y la leche.
- Rallamos media naranja y medio limón y añadimos a la mezcla anterior.
- Añadimos a la mezcla de los huevos la harina y mezclamos con la varilla manualmente. Una vez bien mezclado todo pasamos a amasar con las manos para poder conseguir así una mezcla totalmente homogénea.
- Para que nuestras roscas fritas caseras salgan de rechupete, dejaremos reposar esa masa durante media hora aproximadamente.
- Una vez pasado el tiempo del reposo, cogeremos la masa y comenzaremos a formar las rosquillas, una a una. Para ello hacemos dos bolitas, las pegamos y aplastamos, haciendo finalmente un agujero amplio. Con la cantidad de ingredientes que tenemos nos van a salir unas 50 rosquillas de un tamaño medio.
- Necesitaremos una sartén amplia, donde pondremos abundante aceite de oliva suave para proceder a freír las rosquillas. Antes de echarlas a la sartén debemos esperar a que el aceite esté bien caliente, aunque no en exceso.
- Vamos echando a la sartén estas roscas caseras extremeñas poco a poco. No debemos echar muchas de golpe porque entonces no se harán bien.
- Una vez doradas por los dos lados, las pondremos sobre una bandeja forrada con papel absorbente y, estando aun calientes las rebozaremos en azúcar. Si lo que buscamos es hacer las rosquillas de anís extremeñas, solo tendremos que echarles unas gotas de anís y listas para servir.
Así que, agarra tu delantal y ponte manos a la obra con estos roscos tan apetecibles. Los prepararemos siguiendo la receta original, pero si no quieres freírlos, siempre puedes hacerlos al horno, en freidora de aire o en el robot de cocina.
Roscos fritos de la abuela Mercedes😍RECETA DE MI MADRE
Consejos para unas roscas perfectas
- Si veis que la masa os ha quedado demasiado dura, podemos añadir un poco de aceite o un poco de leche. Según lo que le añadamos las rosquillas nos va a quedar más esponjosa o más compacta.
- Antes de poneros manos a la obra para darle forma a las rosquillas lo mejor es que os untéis las manos con aceite, de este modo evitaréis que se pegue la masa.
- Una vez terminadas podéis servirlas de forma inmediata, no obstante, también podéis guardarlas en una lata de galletas, un recipiente de cristal o plástico con tapadera o incluso en bolsitas de plásticos, en cualquiera de los casos se conservarán perfectamente durante unos cuantos días.
Y ya está, a disfrutar de las más ricas y deliciosas roscas fritas extremeñas caseras… ¡casi como la de la abuela!
Elaboración de roscos fritos paso a paso
- Ponemos en un bol 140 gramos de agua tibia y agregamos 8 gramos de levadura seca de panadero y 15 gramos de azúcar blanco.
- A continuación, ponemos en un bol (el de la batidora o en uno para amasar a mano) la mezcla anterior y añadimos 250 gramos de harina de trigo, 15 gramos de aceite de girasol y 1 pizca de sal.
- Pasamos la masa a un bol ligeramente engrasado, cubrimos con film transparente y dejamos que doble su volumen.
- Pasado este tiempo, desgasificamos la masa y hacemos 15 porciones de unos 25-30 gramos cada una.
- Ponemos cada uno de los roscos en una bandeja, forrada con papel vegetal. Cuando veamos que han crecido de tamaño, cortamos el papel con cuidado, así nos resultará más sencillo poner los roscos a freír.
- Calentamos el aceite hasta alcanzar los 180 ºC.
- Vamos poniendo los roscos a freír con el papel, que se despegará solo, y lo retiramos.
Esta es una receta muy tradicional de estas de toda la vida, aunque en cada casa se hace con sus trucos y aromas particulares. En casa, siempre nos ha gustado añadir un poco de limón y servirlas rebozadas en azúcar. También podemos aromatizarlas con un poco de canela, ralladura de naranja o un par de cucharaditas de anís en la masa si nos apetece.
Podemos hacerlas más finas o más gorditas: cuanto más finas las hagamos, quedarán más crujientes y cuanto más gorditas, más jugosas y esponjosas quedarán.
Cómo hacer rosquillas
- Mezclamos muy bien en un bol 50 gramos de aceite suave y 90 gramos de azúcar blanco.
- Vamos haciendo porciones de unos 20 gramos de masa, las boleamos y les hacemos un agujero en el centro.
- Calentamos el aceite para freír hasta alcanzar los 180 ºC aproximadamente.
Ingredientes para roscos fritos de Semana Santa
- Harina
- Levadura química
- Huevos
- Azúcar
- Aceite de oliva
- Vino blanco
- Ralladura de limón
Preparación de la masa
En un bol grande, tamiza la harina y la levadura química. Haz un hueco en el centro y agrega los huevos, el azúcar, el aceite de oliva y el vino blanco. Incorpora la ralladura de limón y mezcla todos los ingredientes con una cuchara de madera hasta obtener una masa homogénea y suave.
Formación de los roscos
Pasado el tiempo de reposo, toma porciones de masa y forma pequeñas bolas del tamaño de una nuez. Con las manos, haz un agujero en el centro de cada bola y dale forma de rosco.
Fritura de los roscos
En una sartén honda o una freidora, calienta abundante aceite de girasol a fuego medio-alto. Una vez que el aceite esté caliente, fríe los roscos en lotes pequeños, cuidando de no sobrecargar la sartén.
Escurrido y enfriado
Una vez fritos, retira los roscos de la sartén con una espumadera y colócalos sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
Ahora puedes disfrutar de unos deliciosos roscos fritos caseros, perfectos para compartir con la familia y los amigos durante la Semana Santa. Recuerda que esta es solo una receta básica, y puedes personalizarla según tus gustos añadiendo ingredientes como anís, ralladura de naranja o incluso un toque de licor.
Roscos fritos light: una opción más saludable
Los roscos fritos son uno de esos dulces tradicionales que nos transportan a momentos de nostalgia, celebraciones y deliciosos antojos. Sin embargo, la fritura tradicional puede no ser la mejor opción para quienes buscan llevar una dieta equilibrada o saludable. Pero, ¿qué pasaría si te dijera que puedes disfrutar de estos deliciosos roscos sin remordimientos? Hoy te traemos una receta de roscos fritos light que puedes hacer en una freidora de aire o utilizando otros métodos saludables.
La versión tradicional de los roscos fritos requiere mucho aceite, lo que hace que este postre sea muy calórico y no siempre adecuado para aquellos que buscan cuidar su salud. La clave está en reemplazar el aceite frito por la freidora de aire, que utiliza una pequeña cantidad de aceite o incluso ninguno, y optar por ingredientes más saludables sin perder el sabor.
Ingredientes para roscos fritos light
- Harina integral
- Levadura
- Edulcorante
- Aceite de coco derretido
- Leche vegetal
- Esencia de vainilla
Preparación de los roscos light
- Agrega el aceite de coco derretido, la leche vegetal y la esencia de vainilla.
- Poco a poco, añade la mezcla líquida a los ingredientes secos, removiendo con una espátula o con las manos, hasta formar una masa homogénea y suave.
- Con tus manos, forma una bolita y luego, con un dedo, haz un agujero en el centro para darle la forma clásica de rosco.
- Cocina durante 8-10 minutos o hasta que los roscos estén dorados y crujientes por fuera.
- Una vez que los roscos estén listos, sácalos de la freidora y déjalos enfriar durante unos minutos. Para un toque extra de sabor, puedes espolvorearlos con un poco de canela o azúcar de coco.
Disfrutar de un dulce delicioso y tradicional como los roscos fritos no tiene que significar que debas comprometer tu salud o tus objetivos de bienestar. Con esta receta de roscos fritos light en freidora de aire, podrás saborear este postre clásico de una manera mucho más saludable y ligera. Además, la versatilidad de la receta te permite personalizarla según tus preferencias dietéticas. ¿Te animas a probar esta receta de roscos fritos?
Consejos para evitar que los roscos fritos se pongan duros
Evitar que los roscos fritos se pongan duros implica prestar atención a algunos detalles clave en el proceso de preparación y cocción. Por un lado, no sobreamases la masa. Debes amasar la masa solo lo suficiente para que se una ya que si lo hace en exceso activará el gluten en la harina y hará que los roscos salgan más duros.
Por otro lado, al formar los roscos, evita estirar la masa demasiado fina. Es importante que dejes reposar la masa una vez tengas listos los roscos (y antes de freír). Asegúrate de que el aceite esté bien caliente antes de empezar a freír. En caso de que esté frío, los roscos absorberán más aceite y podrían volverse más duros. Además, queremos que se frían y no que se cuezan.
También es importante no freírlos demasiado tiempo. Controla el tiempo de fritura. Freír los roscos demasiado tiempo puede hacer que se sequen. Por último, una vez estén fríos los roscos, guárdalos en un recipiente hermético para evitar que se sequen. Puedes agregar una rebanada de pan en el recipiente para ayudar a mantener la humedad.
Mezcla base para rosquillas fritas
- En un bol, bate el huevo con el azúcar hasta que quede una mezcla espumosa.
- Añade el aceite, la leche, el zumo y la ralladura de naranja.
Incorpora los ingredientes secos
- Tamiza la harina junto con la soda y añádela poco a poco a la mezcla líquida.
- Ve mezclando hasta formar una masa homogénea, suave, un poco pegajosa pero que se pueda manejar con las manos.
Forma las rosquillas
Unta tus manos con un poco de aceite (truco para que no se te peguen) y forma bolitas del tamaño de una nuez.
Freír con mimo
- Calienta abundante aceite en una sartén o cazuela honda. El aceite debe estar caliente pero no humeante (unos 170-180 ºC si tienes termómetro).
- Fríe las rosquillas por tandas, dándoles la vuelta para que se doren por ambos lados.
Trucos adicionales
- Si la masa es muy pegajosa, mójate la mano en aceite de oliva para que puedas manipularlas.
- Cuando esté listo el aceite, metemos nuestras rosquillas y con la ayuda de un palillo (tipo palillo comida china) haremos girar a nuestras rosquillas desde el agujero. De esta forma no perderán las forma y el agujero no desaparecerá cuando se estén friendo.
- El aceite no debe estar muy caliente y te recomendamos que entre tanda y tanda esperes un poquito para que el aceite se recaliente ya que al introducir la masa fría, la temperatura baja un poquito.
- Cuando estén hechas las dejamos reposar sobre papel de cocina para que absorba parte del aceite sobrante pero seguido las vamos a rebozar en azúcar. No tienen que estar frías porque sino el azúcar no se va a pegar. También puedes añadirles un poco de canela por encima.
- Si las quieres más dulces, puedes hacer una especie de almíbar mezclando agua y miel y luego bañarlas en azúcar.
Este producto tiene múltiples variantes. A día de hoy se trata de esa rosquilla tan tradicional de los pueblos que además consigue conservar su propia identidad en cada rinconcito de la geografía como por ejemplo sucede en la comunidad de Madrid donde encontramos diferentes rosquillas muy populares: rosquillas tontas, listas, de Santa Clara y francesas. ¡La versión más básica de las famosas rosquillas de anís!
Tipo de Rosquilla | Características |
---|---|
Roscas Fritas Tradicionales | Esponjosas, con aroma a naranja y rebozadas en azúcar. |
Roscas de Anís Extremeñas | Con un toque de anís, típicas de Extremadura. |
Roscas Fritas Light | Elaboradas con harina integral y cocinadas en freidora de aire. |
Rosquillas Madrileñas | Variedades como tontas, listas, de Santa Clara y francesas. |