Las costillas de cerdo son un ingrediente versátil, sabroso y económico que se presta para una gran variedad de preparaciones. Ya sea en guisos reconfortantes o al horno con un toque especial, las costillas siempre son un éxito en la mesa. A continuación, exploraremos diversas formas de cocinar costillas de cerdo troceadas, desde las recetas más tradicionales hasta opciones innovadoras y sorprendentes.
Guisos Tradicionales con Costillas de Cerdo
Este plato de patatas con costillas de cerdo es un guiso sencillo que todos podemos hacer en casa sin complicaciones. Incluso lo podemos dejar preparado de un día para otro y estará incluso más rico.
Patatas con Costillas de Cerdo: Un Clásico Reconfortante
Lo primero que vamos a hacer para preparar estas patatas con costillas de cerdo es dejar listos todos los ingredientes. Para ello, añadimos a 500 g de costillas de cerdo sal y pimienta negra molida, y pelamos y chascamos 350 g de patatas. Chascar las patatas consiste en arrancar trozos de patata en vez de cortarla haciendo un corte limpio.En la misma cazuela donde doramos las costillas, bajamos a fuego medio y añadimos 15 g de aceite de oliva. Añadimos el ajo, lo dejamos sofreír unos segundos e incorporamos la cebolla, la hoja de laurel y una pizca de sal. En este momento, vamos a raspar con una espátula o lengua de gato los restos que se hayan podido quedar pegados en el fondo de la cazuela de haber dorado las costillas.
A continuación, añadimos el pimiento rojo, lo mezclamos con el sofrito y dejamos cocinar unos 7 minutos hasta que el pimiento esté bien blandito. Después, añadimos 1 cucharadita tamaño postre de pulpa de pimiento choricero y 1 cucharadita pequeña, tamaño café, de pimentón dulce. Mezclamos rápidamente con el sofrito y enseguida añadimos 100 g de tomate triturado. Volvemos a mezclar, subimos un poco el fuego y añadimos 80 ml de vino blanco. Salpimentamos las costillas de cerdo y pelamos y chascamos las patatas. Añadimos el pimiento rojo, lo cocinamos y añadimos la pulpa de pimiento choricero y el pimentón dulce; mezclamos y añadimos el tomate triturado.
Ingredientes:
- 500 g de costillas de cerdo
- 350 g de patatas
- 15 g de aceite de oliva
- Ajo
- Cebolla
- Hoja de laurel
- Pimiento rojo
- Pulpa de pimiento choricero
- Pimentón dulce
- 100 g de tomate triturado
- 80 ml de vino blanco
Guiso de Costillas de Cerdo y Verduras: Un Plato de Cuchara Completo
Este guiso de costillas de cerdo y verduras bien se podría llamar «plato de cuchara con lo que se tenga». Pon un poco de sal a las costillas. Echa el aceite en una sartén antiadherente mediana, y cuando esté caliente fríe las costillas. Ve echándolas en una cacerola.
Trocea el ajo y la cebolla en dados muy pequeños. Pela el tomate y córtalo de la misma manera o, si prefieres, rállalo. Quita los extremos de las judías verdes y cortarlas en trozos. Pela las patatas y trocéalas sin que el cuchillo llegue al final del corte y tirando un poco hasta que parta. Te lo explico en este minivídeo. Trocea los champiñones.
Cortar patatas para guisos
Fríe el ajo y la cebolla en el aceite de freír las costillas. Cuando lleven 5 minutos a fuego medio, añade el tomate y un poco de sal. Deja que se fría bien todo. Añade las judías verdes, los champiñones y las patatas y da unas vueltas. Añade la cucharada de harina y la de pimentón, remueve, y vuelca enseguida en la cazuela. Echa un poco de agua en la sartén para que no quede ningún resto del sofrito y viértela en la cazuela. Añade un poco más de agua, como 1 cm por debajo de la parte superior de los ingredientes, sin que lleguen a flotar -esto es orientativo, porque depende mucho de la cazuela con la que guises-. Ponlo a cocer a fuego medio, hasta que veas que el caldo reduce y el guiso está hecho.
Sigue todos los pasos pero en vez de cazuela usa una olla exprés. En 8 minutos lo tendrás listo. Abre la olla cuando baje la válvula y deja de 5 a 10 minutos más al fuego para que reduzca el caldo.
Costillas de Cerdo en Adobillo: Un Regalo de Sabor
Las costillas de cerdo en adobillo, una receta de mi amiga María de Écija y a su hija Inma que han querido regalarme con todo su cariño. ¡Y qué regalazo!
- Cortar la carne y sazonar. Una vez que tenemos las costillas troceadas, le ponemos un poco de sal y pimienta molida.
- Cocinar la carne. Llevamos una cazuela al fuego y echamos un buen chorrito de aceite de oliva. Cuando esté caliente echar las costillas y las mantenemos a fuego medio varios minutos.
- Preparar la salsa. Seguimos rehogando a fuego medio unos minutos más para que los ajos y demás ingredientes aporten su sabor. Cuando ya las tenemos bien doradas, añadimos una cucharadita de pimentón. Ponemos también una cucharadita de cominos molidos y seguidamente añadimos el Vinagre de Jerez.
- Dar la vuelta a la carne.
- Reducir la salsa y servir.
Costillas de Cerdo al Horno: Un Mundo de Posibilidades
Las costillas de cerdo son un ingrediente barato, sabroso y lleno de sabor. Nos gustan tanto que echando un vistazo a nuestras publicaciones he encontrado un montón de recetas, tanto para cocinarlas en el horno al estilo americano, como para utilizarlas en otras recetas de guisos, estofados y arroces. Hoy os quiero enseñar estas formas de cocinar costillas de cerdo para chuparse los dedos, literalmente.
Las hemos organizado por el tipo de utilización, ya sea en horneados -donde encontramos la mayoría de las recetas- como en guisos y otras preparaciones que también os aconsejamos, ya que este ingrediente está buenísimo se cocine como se cocine.
- Para que el proceso de elaboración sea más corto, en lugar de asar el costillar entero, vamos a partirlo cortando las costillas de forma que el hueso quede en medio y tenga algo de carne a los dos lados. Preparamos un adobo, mezclando las costillas con una cucharada de pimentón picante, un buen pellizco de hierbas aromáticas y dos cucharadas de salsa barbacoa. Precalentamos el horno a 190º y mientras alcanza esa temperatura vamos distribuyendo las costillas en una fuente de horno. Al terminar, las apilamos en una tabla formando un montón y barnizamos la parte exterior con los jugos que quedaron en la fuente mezclados con otra cucharada de salsa barbacoa, para darles el brillo y el "pringue" final.
- Esta receta tradicional de costillas al horno está tan sabrosa que casi os hará olvidar aquella preparada en barbacoa.
- Si hay un país experto en la cocina de las costillas de cerdo, es Estados Unidos. Fue concretamente en Louisiana donde aprendimos a preparar estas costillas al horno estilo americano, sabrosas, con el toque de cáscara de naranja que les da un toque ácido muy especial.
- Las costillas barbacoa son un plato infalible en reuniones de amigos, concentraciones para ver eventos deportivos, fiestas de cumpleaños y cualquier otra disculpa para disfrutar comiendo con las manos. En esta receta, hasta la salsa es casera, por lo que os recomiendo que no os la perdáis.
- La mejor manera de cocinar las costillas a la barbacoa sin contar con una parrilla de leña pasa por hacerlas al vacío y a baja temperatura, para dar después el último toque al horno. Esta técnica permite, además, que las costillas se cocinen junto a una marinada, que hace que queden muy sabrosas, sin depender solo de la salsa (que aun así se puede añadir al final).
- La primera vez que vi esta receta de costillas glaseadas me atrajo el color de la carne, tras el baño en la miel de ajo negro y el paso por el horno. Todo un hallazgo para los que busquen sabores intensos.
- Si antes os hablaba de la receta de Luisiana con el toque de naranja, tampoco las costillas al estilo de Carolina del Norte tienen nada que envidiarlas. Para muchos, hay dudas entre esta receta y la de Nueva York como la receta perfecta de las costillas de cerdo al horno. ¿Cuál os gusta más?
- Parea los que disfrutan con los contrastes, la receta de estas costillas al horno con miel resulta perfecta. La caramelización de la miel produce un dorado superapetecible en la carne y el toque de hierbas aromáticas, culmina esa deliciosa elaboración.
- Esta receta de costillas al kalimotxo, -la mezcla de vino y Cocacola- me resultó seductora cuando la oí por primera vez y desde que la probé, se ha convertido en una de mis preferidas. Además del delicioso sabor que se consigue, la gracia de decir el nombre de este plato a los invitados suele funcionar muy bien. ¡Probadlas!
- Las costillas al horno son como bien decimos, un plato para chuparse los dedos. Así ocurre con esta receta de Esther Clemente.
- Costillas de cerdo y cerveza, una buena mezcla. ¿Y si mezclamos ambos ingredientes y los cocinamos en el horno? Este es el resultado tras cocinarlas. Unas costillas de cerdo asadas con cerveza que no dejarán a nadie indiferente.
- Mi amigo neoyorquino Marco fue quien me enseñó a prepararlas y realmente es las costillas New York Ribs. Quedan tiernas, sabrosas, perfectas. Una primera cocción en la cacerola y una larga finalización en el horno, son las claves para hacer esta receta.
- Un costillar de cerdo asado con cebolla y patatas, es una receta completa y nutritiva, perfecta para cuando tenemos invitados a comer, si son familia, amigos o personas de confianza ya que las costillas siempre exigen una dosis de informalidad. Esta costillas asadas con patatas se hace preparando una "cama" de patatas sobre la que asar las costillas.
- Me encanta el uso de la Cocacola en esta receta para conseguir un lacado o laqueado brillante para las costillas de cerdo, que recuerdan algunas preparaciones asiáticas similares. El sabor, -puro e intenso- resulta más que recomendable.
- La salsa teriyaki es muy usada en Japón y otros países asiáticos en sus barbacoas orientales, tanto para verduras como para carnes, aves y pescados. En esta receta de costillas de cerdo con salsa teriyaki se le saca mucho partido a esta salsa, ya que además de caramelizar sirve como sazonadora de la carne de cerdo.
- Continuamos con la serie de recetas americanas para hacer las costillas de cerdo al horno. La ciudad de Búfalo, famoso por sus alitas de pollo picantes o Buffalo Wings, también tiene su propia receta de costillas de cerdo al estilo Búfalo, que ha versionado Pintxo.
- La cocina de los Estadus Unidos es muy variada y una de sus características es la utilización de distintos tipos de especias. Me gustan mucho las especias cajún, una mezcla de especias para carne que con sus toques picantes y aromáticos le va muy bien a esta receta de costillas con salsa cajún.
- Hacer primero un adobo casero con este marinado ibicenco es la mejor forma de garantizar el éxito.
- Las costillas de cerdo caramelizadas al chocolate son una propuesta bien sugerente, para variar en nuestras recetas habituales de costillas asadas. El toque del chocolate resulta obvio e inolvidable y da un aroma especial a la casa tras el paso por el horno.
- Las salsas asiáticas como la salsa de ostras o la salsa Hoisin son muy buenas para asar carnes ya que forman una especie de costra en su exterior, garantizando que la carne está por dentro bien jugosa, aunque esté muy crujiente por fuera.
- Funciona tan bien la mezcla de curry y miel que nos encanta en muchos platos como tajadas de pollo, -alitas en especial- y otras carnes. Con las costillas de cerdo con curry y miel también es una combinación con el éxito asegurado.
- Las costillas de cerdo caramelizadas con mermelada de manzana, no te sorprenden porque desde un primer momento sabes que te van a encantar. Probadlas y os convenceréis de inmediato de esta combinación de ingredientes.
- Las costillas de cerdo y la fruta, combinan muy bien -como casi todas las piezas del cerdo que se suavizan con el contraste afrutado-. Buena prueba es esta receta de costillas con salsa agridulce de melocotones que seguro que os va a gustar tanto como a mi.
- En tiempos, el coñac y su versión española el brandy eran muy utilizados en las recetas de cocina más variadas, en especial para guisos de carne. En esta receta de costillar de cerdo al brandy, hemos encontrado esa clásica elaboración tradicional que seguro que os gusta.
- Estas costillas de cerdo adobadas con salsa de soja, son diferentes a las costillas habituales. La soja aporta sabor y color a las costillas y aporta a esta elaboración un elemento diferenciador, para distinguirlas de las clásicas costillas con salsa barbacoa.
- Un guiso de costillas aromatizado con una buena cantidad de especias para curry, tiene todo lo necesario para resultarme muy atractivo.
- Un buen plato no está reñido con las prisas de hoy en día, así que aprender cómo preparar unas costillas a la barbacoa listas en cinco minutos, resulta siempre interesante. Si el resultado se parece a lo que tenéis sobre este párrafo, entenderéis por qué nos gusta esta receta.
Otras Preparaciones Deliciosas
Costillas con Alubias Tiernas: Un Maridaje Perfecto
Las alubias tiernas o pochas son uno de los manjares más sabrosos entre las legumbres. Un guiso de pochas frescas es una delicia que alcanza grados de perfección si los sacramentos utilizados para darle gusto a las legumbres son estas estupendas costillas de cerdo. ¿Quién podría resistirse?
Costillas a la Miel: Sabor sin Complicaciones
Aunque -como habéis visto-, la mayoría de preparaciones para las costillas de cerdo se hacen con el horno, también podemos preparar platos tan sabrosos como estas costillas a la miel sin necesidad de encender este electrodoméstico.
Patatas con Costillas: Un Clásico de la Abuela
Las patatas con costillas son uno de esos platos que asocio a los recuerdos de mi abuela. Qué buena mano tenía para dar sabor a los guisos más simples como este, hecho con unas patatas, unas costillas y un poco de caldo.
Macarrones con Costillas: Una Combinación Sorprendente
Los macarrones se pueden utilizar en mil y una recetas y no tiene por qué ser todas con salsas tradicionales.
Arroz con Ragú de Ternera y Costillas de Cerdo: Aprovechamiento Creativo
Terminamos con otra receta de arroz, una receta de aprovechamiento de sobras en la que con este arroz con ragú de ternera y costillas de cerdo.
Arroz al Horno con Costillas, Setas y Castañas: Un Toque Otoñal
Esta original mezcla de costillas, setas y castañas, -sin duda con sabor otoñal- nos encantó desde el primer momento. Seguro que este arroz al horno con costillas, setas y castañas os conquistará a todos cuando probéis la receta para salir del arroz al horno clásico.
Consejos Finales
- En estos guisos siempre es lo mismo. Fríe la carne que sea en aceite de oliva virgen extra y pásala a la cazuela.
- ¿Necesitas ideas de ingredientes? Sobre la Cocotte ya te he hablado una y mil veces. Y no me cansaré de hacerlo.
- ¡Ah, un último truco! Si tus verduras son tiernas pero no sabes si el cerdo lo es, siempre puedes cocer antes las costillas con la zanahoria unos 10-15 minutos. El caldo en que las cueces es el que emplearás luego para el guiso.
- Unas costillas de cerdo bien cocinadas son fantásticas, pero si te quedan duras, te pueden estropear el plato, ¡ojo a este tema!
- Este guiso de costillas de cerdo no tiene ninguna complicación. Se prepara fácilmente y además de exquisita es una receta bastante económica.
- Admite muchas guarniciones. Yo he elegido patatas y las he hecho a tacos, pero las opciones son numerosas.