¡Nueva receta de pan sin gluten! Tenía muchas ganas de compartir esta receta con vosotras, porque es una auténtica maravilla. Y es que te quiero animar a que prepares en casa un delicioso pan sin gluten de trigo sarraceno. Es tan fácil de hacer y está tan rico que cuando hagas el primero, seguro que se convierte en un indispensable de tu despensa.
Los ingredientes son súper sencillos y lo más increíble es que es como hacer un bizcocho: mezclar ingredientes, verter en un molde y hornear. Sin fermentaciones, sin reposos… ¡sin nada! Espero que os guste mucho.
Así que para esos días en los que no puedes ni quieres, esta receta que te traigo hoy es perfecta. Y el resultado es muy sorprendente, no es un pan sin gluten seco y compacto, al contrario, queda muy bien. Puedes comerlo una vez ya esté hecho o sino hacer como yo y una vez frío cortarlo en rodajas y congelar. Después las metes en la tostadora y ya tienes un pan crujiente perfecto para comer.
¿Te animas a preparar este pan? Abajo te dejo la receta completa e incluso un vídeo con el paso a paso.
Pan de Trigo Sarraceno | Sin gluten, Vegano y Saludable
Ingredientes y Elaboración
Súper sencillos y fáciles de tener: harina de trigo sarraceno, agua, levadura seca de panadero, aceite de oliva y por supuesto sal y psyllium.
La receta es tan sencilla como mezclar todos los ingredientes en un bol y después llevar la mezcla a un molde para bizcochos o el que prefieras. Horneas y lo tienes listo. ¿A que no puede ser más fácil?
Este pan sin gluten de trigo sarraceno solo lleva 5 ingredientes: harina de trigo sarraceno ecológica, psyllium, sal marina ecológica, levadura seca ecológica y agua mineral, ¡qué 5 ingredientes más fáciles!
Ingredientes Clave
- Trigo sarraceno: El trigo sarraceno o alforfón es un pseudocereal y un superalimento por su alto valor nutricional. Pseudocereal porque contiene proteínas de mayor calidad que los cereales (tiene todos los aminoácidos esenciales), más ácidos grasos saludables y más minerales, además de no contener gluten. Su aporte en carbohidratos complejos es elevado y contiene fibra de tipo soluble e insoluble. Es rico en vitaminas, especialmente del grupo B, en minerales como magnesio, hierro y potasio, y en oligoelementos.
- Psyllium: uno de los problemas que tiene el pan sin gluten es que no tiene la esponjosidad o consistencia del pan con gluten. El psyllium, que proviene de una planta llamada plantago ovata, va a cumplir esa función de hacer esponjoso nuestro pan. El psyllium favorece la retención del agua, aumenta le volumen de la masa y la hace jugosa y suave.
El psyllium es un ingrediente esencial para realizar panes sin gluten. Son unas semillas de una planta y además una fibra dietética que actúa como espesante alimentario. Yo incluso lo uso un montón para añadirlo a masas de hamburguesas o albóndigas caseras ya que ayuda a que la masa quede compacta y sea fácil de manejar.
Si no tienes psyllium puedes igualmente hacer el pan, tan solo ten en cuenta que tendrás que usar un molde de este tipo porque la masa es muy líquida.
Si quieres enriquecer el pan, puedes incorporar semillas de girasol y calabaza.
Antes de empezar, y por si aún no lo habéis visto, por favor echad un vistazo a esta receta del mejor pan sin gluten. El resultado es más espectacular que el de esta receta pero también implica muchos más ingredientes y mucho más tiempo de elaboración.
Hay quienes adoran su sabor y hay quienes no lo toleran. Pero hay una cosa segura, la harina que se obtiene de él tiene unas cualidades fantásticas para la panificación sin gluten.
El problema de la harina de trigo sarraceno es que da migas muy cerradas y que tiene un sabor muy intenso que no a todo el mundo le agrada. El reto que me proponía esta vez era conseguir un pan de trigo sarraceno con volumen y rico de sabor. Recurriendo a la mínima cantidad de almidón u otra harina que corrigiera esos problemas.
Receta Detallada
Ingredientes
- 460 gramos de harina de trigo sarraceno
- 20 gramos de psyllium en polvo
- 560 mililitros de agua
- 1 cucharada de sal
- 1 sobre de levadura seca de panadero (7 gramos)
- 4 cucharadas de aceite de oliva
Preparación
- Precalienta el horno a 180 °C.
- En un bol, mezcla bien la harina de trigo sarraceno con la sal, el psyllium, el aceite, agua y la levadura. Yo utilizo una levadura de acción rápida que se añade directamente junto al resto de ingredientes, pero si la tuya es normal, mézclala primero junto con un poco del agua de la receta y reposa unos 10 minutos.
- La mezcla quedará algo espesa, un poco más que la de un bizcocho, pero no te preocupes. Fíjate en el vídeo para ver cómo me queda a mí.
- Forra un molde apto para horno y añade la masa.
- Precalienta el horno a 200ºC con calor arriba y abajo. el molde con el pan y déjalo hornear 1h a 200ºC.
- Introduce el molde al horno precalentado a 220ºc - 240ºc. En unos 45 minutos tendrás tu pan listo. ¿Sencillo, verdad?
- Mezcla todos los ingredientes ¡y al horno! En el mío tarda unos 40-45 minutos, vete revisando con un cuchillo hasta que éste salga limpio y seco.
En un bol amplio, colocar la harina, sal, psyllium. Sumar el fermento, ir agregando el agua de a poco y mezclar bien. Les dejo video para dar idea de la consistencia que debe quedar. Pasar al molde, que si no es de silicona debe aceitarse. Cubrir con film o bolsita de nylon. Dejar leudar un par de horas. No menos de dos horas.
Volcar el grano en un bol grande y cubrir de agua. Pasadas las horas, lavar y escurrir. Verter en una procesadora, añadir 120ml de agua y la sal. Triturar. Si es necesario añadir más agua, pero no sobrepasar los 240ml. La textura dependerá de como te guste, puedes dejarla grumosa o lisa. Volcar en un bol o molde la masa y tapar con un paño. Pasadas las horas, verás que la masa ha crecido.
Colócalo en un bol grande y cúbrelo con agua. Tritura hasta que se mezcle el trigo sarraceno con el agua. Si ves que necesitas más agua para poder triturar añádela poco a poco, hasta un máximo de 240 ml. Vierte la mezcla de nuevo en un bol* y añade el psyllium, incorpórandolo a la mezcla con una cuchara de madera. En este punto puedes añadir también algunas semillas de girasol, calabaza, sésamo,... Personalmente evito usar semillas de lino y chía porque tienen mucílagos y apelmazarían demasiado la masa. Cubre el bol con un paño de cocina limpio y deja reposar la mezcla durante 24 horas a temperatura ambiente o dentro del horno (apagado). Pon un trozo de papel de horno en la bandeja y espolvorea sobre él un poco de harina de trigo sarraceno. Coloca la masa sobre el papel de horno y dale forma de hogaza con las manos.
Llevar a horno medio precalentado por aproximadamente 45 minutos o hasta que el palillo salga seco. Pasado el calor más intenso, desmoldar, de preferencia sobre rejilla.
Otras recetas con trigo sarraceno
Si quieres probar más recetas, aquí te dejo algunas (con gluten):
- Pan casero de maravilla
- Naan indio casero
- Focaccia clásica
- Malawah, pan de Yemen
- Pan Challah estilo brioche
Si lo vas a consumir en los 3 días siguientes a hornearlo, entonces no tienes porqué congelarlo, pero siempre puedes darle un toque en la tostadora para que quede más crujiente.
Conservación y Más Ideas para tu Pan
Una vez horneado, yo siempre lo dejo enfriar y después lo corto en rebanadas. Las congelo y luego cuando lo vaya a consumir simplemente lo tuesto.
Superó mis expectativas... Se puede porcionar y guardar en el freezer, retirando luego, solo la porción que vayamos a consumir.
Una vez frío, consérvalo en la nevera y tuéstalo a medida que quieras consumirlo en una sartén o en un grill con un poco de aceite de oliva o ghee. También lo puedes congelar. Para hacerlo, corta el pan en rebanadas y coloca un trozo de papel de horno entre ellas para que no se enganchen.
Pon un trozo de papel de horno en la bandeja y espolvorea sobre él un poco de harina de trigo sarraceno. Coloca la masa sobre el papel de horno y dale forma de hogaza con las manos. Si has utilizado un bol como el que te comentaba en el punto 5 apenas tendrás que darle forma.
Yo elegí mal la budinera que quedó chica, porque leudó más de lo esperado.
Alternativas y Consejos
- A este pan podemos añadirle nueces, romero, orégano, ajo, arándanos secos… y obtendremos versiones para todos los gustos del mismo pan