Spanakopita, que significa tarta de espinacas, es una receta griega. Básicamente, consiste en un pastel griego de espinacas con queso feta. Los griegos suelen comerla para desayunar o como parte del aperitivo en porciones pequeñas. Esta empanada, o mejor llamado pastel, es todo un emblema de la cultura griega y no hay panadería que se precie que no la ofrezca tanto entera como por porciones. Dicen que se debería llamar spanakotiropita puesto que el pastel lleva queso feta y es tan famoso como nuestra propia tortilla de patatas.
La gastronomía griega, puramente mediterránea, es una oda total a las verduras y no hay más que observar sus recetarios para darse cuenta de ello. Una receta deliciosa similar a la tiropita griega y que no deja de ser una receta vegetariana de rechupete. La cocina grieta me apasiona, como bien reflejo en mi blog, y esta receta tenía que estar presente en Recetas de Rechupete, pues es una de esas recetas tradicionales que cuando vas a Grecia tienes que probar. La spanakopita o pastel griego es tremendamente popular al igual que la tradicional Moussaka, o la Youvarlakia.
Si no la habéis probado nunca, os la recomiendo, crujiente por fuera y tierna por dentro por este relleno tan cremoso. Hoy por fin comparto con vosotros un pedacito de este pastel de espinacas y queso feta que me hizo enloquecer durante mis pasadas vacaciones en Grecia. Este pastel griego es conocido como Spanakopita y podéis encontrarlo relleno de diferentes cosas, si bien, a mí, la receta clásica de espinacas y feta es la que más me gusta. Os va a encantar porque además es muy sencillo de hacer, la pasta filo se compra en láminas y solo tenemos que prepare el relleno que consiste en 4 ingredientes.
En menos de 30 minutos tenía el pastel griego en el horno, y en menos de 15 minutos ha volado de la mesa. Sobre todo, lo preparo cuando viene alguien a casa de visita y hasta el momento no ha fallado. Es de estas recetas que viene genial cuando tienes que llevar algo a una comida con familia o amigos. Yo espero impaciente a que salga del horno y si puedo lo tomo templado, pero se suele servir frío. Queda súper crujiente y me encanta que al coger un trozo se desprendan trocitos de la pasta filo.
Como veis le he dado forma de pastel redondo pero otra forma muy común de este pastel es en espiral, como una ensaimada. Podéis ir alternando o hacer vuestro propio diseño. La pasta filo tiene muchas más aplicaciones de las que pensaba y, a pesar de que no la he utilizado mucho, ya he descubierto alguna que otra receta deliciosa con ella como la tarta de manzana o para hacer paquetitos de queso. Os aseguro que os vais a enamorar de un pedacito de Grecia después de probar este pastel de espinacas.
Siempre me llamó la atención, pero también le tenía respeto. Y aunque es exactamente como la receta tradicional, si es una adaptación muy parecida. Añadiendo más ingredientes al relleno para hacerlo más completo y sabroso. El resultado merece mucho la pena. Es crujiente por fuera gracias a la pasta filo y tierna por dentro con un relleno cremoso y hacerla, no te llevará más tiempo del que lleva una empanada tradicional. Te dejo el paso a paso en un mini vídeo en los Reel de instagram, donde se ve más fácilmente el proceso de elaboración.
Lo más tedioso será ir formando las capas de pastel filo, una detrás de otra, debidamente untadas en abundante mantequilla derretida. Como truco indispensable, lo único que se debe tener en cuenta es que la masa filo se seca a mucha velocidad por lo que habrá que ser raudo disponiendo las capas de la misma, una detrás de la otra. Esta masa la venden refrigerada en algunos supermercados. Importantísimo poner en la base de la bandeja que se vaya a utilizar para hornear una capa de pan rallado, con o sin aromas, pues servirá para absorber el líquido que suelten las espinacas, la cebolla y el queso y que así no se quede nuestra spanakopita húmeda en la base. La gracia, precisamente, es que quede bien crujiente.
SPANAKOPITA | Pastel de espinacas y queso feta | MASA FILO | Receta griega | COOKING GIBA
Ingredientes
Para preparar este delicioso plato, necesitarás los siguientes ingredientes:
- 1 paquete de masa filo (necesitamos 12 láminas de masa)
- 1 diente de ajo
- 1 kg. de espinacas frescas
- 120 ml. de aceite de oliva virgen extra
- 250 g. de queso feta
- 50 g. de uvas pasas
- 1/2 cebolla morada
- 2 huevos M
- 50 g. de nueces
- 20 ml. de aceite de oliva virgen extra
- 140 g de mantequilla derretida
- Pan rallado
A continuación, se muestra una tabla con las cantidades de ingredientes para 6 porciones:
| Ingrediente | Cantidad |
|---|---|
| Masa filo | 12 láminas |
| Espinacas frescas | 1 kg |
| Queso feta | 250 g |
| Huevos | 2 unidades |
| Mantequilla | 140 g |
Preparación del Relleno
Comenzamos preparando el relleno en un bol grande, para ello, escurrimos bien el queso feta y lo desmenuzamos con las manos o con ayuda de un tenedor. Añadimos un pellizco de pimienta negra recién molida y unos de los huevos (el otro es para pincelar antes de hornear). Pelamos la media cebolla y picamos en trocitos muy pequeñitos. Hacemos lo mismo con los dos dientes de ajo, picamos muy finitos (incluso si tenéis para hacerlo tipo puré, mejor).
Añadimos un poco de aceite de oliva virgen extra a una cazuela y doramos el ajo y la cebolla. En cuanto tengamos todo pochado, añadimos las espinacas frescas y salpimentamos al gusto. Removemos durante 2 minutos hasta que se vuelvan blanditas y suelten parte de su agua. Sacamos de la cazuela y retiramos ese líquido sobrante que no necesitamos. Lo podemos hacer con un colador grande, deben quedar sin nada de líquido. Ponemos las uvas pasas (sin pepitas) en un vaso de agua y calentamos (hidratamos de manera rápida) en el microondas durante un minuto. Si no tenemos micro, podemos hacerlo con agua caliente en un cazo al fuego durante 3-4 minutos. Picamos las nueces en trozos pequeños.
Juntamos todo lo que tenemos reservado en el bol con el queso y el huevo, es decir las espinacas con el ajo y la cebolla, las uvas pasas y las nueces. Mezclamos todo muy bien hasta conseguir una mezcla homogénea. Lo importante, en cualquier caso, es evitar que las espinacas mojen en exceso el pastel con el agua que sueltan en su cocción así que, en nuestro caso, las hemos salteado y después escurrido antes de añadirlas a la mezcla de queso y huevos. Colamos y escurrimos las espinacas salteadas con la cebolla usando un colador. Mezclamos todos los ingredientes hasta que quede una mezcla homogénea.
Montaje y Horneado
Para montar la spanakopita hay que trabajar rápido y no nos puede faltar de nada. Desplegamos una lámina de masa filo sobre la tabla de madera y pincelamos una lámina de masa con aceite de oliva virgen extra. Colocamos otra lámina de masa o pasta filo encima y engrasamos de nuevo. Colocamos una parte del relleno de espinacas sobre el extremo más largo de la masa filo y envolvemos en forma de cilindro. Colocamos en el centro de un molde redondo, enrollado sobre sí mismo.
Preparamos más cilindros de masa filo y enrollamos alrededor hasta cubrir toda la superficie del molde, formando una espiral tal como veis en la foto. Que no os asusten las explicaciones. Es muy fácil. Cuando estemos acabando de hacer la espiral, precalentamos el horno a 190º C. Introducimos la bandeja en el horno al horno a 190° C, con calor arriba y abajo, durante 25 minutos aproximadamente o hasta que esté dorada y crujiente. Todo depende de vuestro horno.
Preparamos un molde rectangular de unos 20 x 25 cm con 1 cucharada de pan rallado. Derretimos 140 g de mantequilla y montamos la tarta comenzando con una capa de masa filo que pintaremos con mantequilla derretida. Seguimos haciendo lo mismo con 4 hojas más de masa filo, pintándolas todas con mantequilla. A continuación, vertemos el relleno de la tarta sobre las 5 primeras capas de masa filo. Cubrimos el relleno con otras 5 capas más de masa filo pintando cada una de ellas con mantequilla.
En una bandeja apta para el horno disponer una generosa capa de pan rallado - normal o con perejil y ajo - y encima del pan rallado ir disponiendo las láminas de masa filo. Lo ideal es que compartan el centro pero que se abran hacia los cuatro lados. Cuando ya estén todas las capas puestas, poner en el centro la mezcla de las espinacas previamente preparada y doblar, una a una desde cada lado, esas capas de pasta filo hacia el centro. Poniendo por supuesto un poco de mantequilla derretida entre cada capa. Lo ideal será dejar un par de láminas de masa filo para el final.
Cortar la spanakopita en cuadrados, llegando hasta el fondo y pincelar de nuevo por encima con mantequilla. Llevar al horno y cocinar durante una hora aproximadamente o hasta que esté bien dorado por encima. Esperamos a que la tarta no esté tan caliente para cortarla en porciones. Precalentar el horno a 180 ºC. Pela y trocea en trozos pequeños la cebolla y la zanahoria. Póchalos en la sartén con un chorrito de AOVE y sal a fuego medio hasta que queden blandos. Añade después las nueces picadas y las espinacas, por tandas ya que son muy voluminosas al principio. Puedes también cocerlas al vapor, aparte y después integrarlas en la sartén con una pizca de sal.
Variantes y Consejos Adicionales
Para el relleno de queso, existen varias versiones: las que usan exclusivamente queso feta y las que combinan feta con requesón. Con las espinacas, las opciones también son varias: unos las añaden crudas al resto del relleno y otros las blanquean o las saltean ligeramente con la cebolla.
En caso de que tengáis prisa, podéis emplear espinacas congeladas. En ese caso las añadimos descongeladas y escurridas tal cual al bol con el resto de ingredientes. La mezcla del relleno se puede enriquecer con un poco de cebolla pochada, piñones y tomillo o eneldo, pero no hemos querido desviarnos en exceso de la receta original.
Retira del horno, emplatamos y servimos inmediatamente. Y… ¡A disfrutar! Un bocado vegetariano perfecto para compartir con los tuyos, la familia o amigos. Recordad que necesitaremos de casi una hora para hacerla, unos 55 minutos, 30 minutos de preparación bastante sencilla y luego el horneado de 25-30 minutos, depende de tu horno.
Retira de la sartén y deja templar. En un bol amplio, bate un huevo, desmenuza en él el queso feta y añade a continuación las verduras que hemos pochado. Mezcla. Despliega sobre la encimera limpia, una lámina de masa filo. Píntala con aceite y pon otra lámina sobre ella. Coloca a lo largo de un extremo, un poco de relleno. Enrolla la masa con el relleno dentro haciendo forma de canuto. Después, enróllala sobre sí misma como si fuera un caracol. Haz lo mismo con el resto de masa. Y enrolla el siguiente canuto después del anterior que teníamos con forma de caracol, de tal forma que amplíes el caracol. Ponlo en un molde redondo para que coja forma.
Píntalo con el huevo que nos queda y espolvorea unas semillas de sésamo. Hornearlo a 180º durante 25 o 30 minutos. Cuando veas que coja un color dorado apropiado. Y… ¡disfruta! está realmente delicioso.