Igual que Penélope Cruz o Salma Hayek, Inés Sastre representa el prototipo de belleza española y latina en gran parte del mundo. Su rostro transmite una personalidad exótica, elegante y unida al mundo de la jet set internacional.
Nacida el 21 de noviembre de 1973 en Valladolid, Inés creció en Madrid y estudió en un colegio de monjas bilingüe español-francés. De bien pequeña ya demostró su talento ante las cámaras.
Primeros Pasos en el Mundo del Espectáculo
Sastre se inició en el mundo del espectáculo con siete años, cuando fue damita de la Cruz Roja. Esta campaña publicitaria captó la atención de Carlos Saura. El cineasta vio el anuncio en el que Inés aparecía comiendo con una enorme sonrisa la hamburguesa de la conocida cadena de restaurantes de comida rápida.
Comenzó su carrera a los 12 años protagonizando un anuncio de hamburguesas. A los quince años gana el concurso “Elite Model Look”, organizado por la Agencia Elite, pero no firma con la agencia y pasa a la historia por rechazar el premio. Chica inteligente, prefiere terminar sus estudios de bachillerato y después de literatura francesa en la Sorbona (París).
En el cine se estrenó pronto y con buenos directores, con Carlos Saura y El Dorado. Su carrera como actriz siempre ha ido paralela a la de modelo.
El Ascenso al Estrellato
Tres años más tarde Sastre ganó el premio Look of the Year de la agencia de modelos Elite, con quien firmó un contrato que la lanzó a nivel internacional. Inés puso una única condición: poder ir a la universidad. Eligió París, una de sus ciudades favoritas junto a Londres, para continuar sus estudios como cualquier joven de su edad.
Se matriculó en Filología Francesa en la Universidad de La Sorbona. “Yo creo en el esfuerzo y la tenacidad. Y pienso que fui valiente matriculándome en la Sorbona. Fue una decisión tremendamente difícil”, apuntó la actriz, que también reconocía que le resultó complicado compaginar los estudios con su trabajo en la moda.
“En primer curso saqué un cero en lingüística general, y no paraba de llorar en plan Sarah Bernard, diciendo: 'me vuelvo a mi país'. Pero en el siguiente examen conseguí un sobresaliente. Gracias a su contrato con Elite consiguió trabajar con diseñadores y marcas prestigiosas como Chanel, Paco Rabanne, Jean-Paul Gaultier o Vivienne Westwood.
Su Amor por el Cine
Pero en esos años Inés tenía la espinita clavada de haber dejado apartado el cine. Así que volvió a probar suerte y empezó a recibir ofertas. “La publicidad me permite no tener que hacer 15 películas para vivir como quiero”, manifestó en una ocasión.
Apareció en la película Beyond the clouds (1995) de Michelangelo Antonioni y posteriormente trabajó con Gérard Depardieu en El conde de Montecristo (1998), actor con quien compartiría protagonismo nuevamente en Vidocq (2001). Otra de sus películas más recordadas es Il testimone dello sposo (1998), de Pupi Avati.
Un año más tarde, fue una de las protagonistas del Calendario Pirelli con una impactante fotografía en la que aparecía desnuda y dio la vuelta al mundo. Inés continuó formándose y se licenció en Literatura Medieval mientras combinaba moda e interpretación.
💔 La HISTORIA OCULTA de INÉS SASTRE de RECHAZAR MILLONES a los ESCÁNDALOS que la MARCARON
Vida Personal y Regreso a España
A diferencia de otras modelos, Sastre siempre ha sido muy celosa de su intimidad pero sus diferentes relaciones han ocupado varias portadas de las revistas del corazón. Tuvo un romance con Colate Vallejo-Nájera en el 2000, cuando entonces él era un desconocido, y también se la relacionó con Giles Thorton y Antonio Fournier Conde.
En 2002 se enamoró del empresario belga Michael de Maleingram, con quien incluso sonaron campanas de boda, pero rompió con él y empezó una nueva relación con Nick Taylor. Su gran historia de amor fue con Alex Corrías, un empresario italiano que era su amigo desde hacía diez años. En abril de 2006 Inés dio el “sí, quiero” a Corrías, una boda celebrada en Londres que fue toda una sorpresa y que contó con solo 80 invitados.
Solo un año después de su boda, Inés puso fin a su matrimonio. Posteriormente salió con el actor francés Gregory Reznik y con el presentador televisivo Jean-Luc Delarue. Desde 2012 a 2017 tuvo una relación estable con el empresario italiano Michele Alfano.
Tras treinta años residiendo en París, Inés tomó la decisión el año pasado de volver a Madrid. “Quería que mi hijo viviera una época en España, un país alegre y seguro, porque yo de jovencita me lo pasé muy bien en Madrid y quería que él también tuviera su momento español”, aseguró cuando se conoció la noticia.
Inés Sastre nos muestra su lado más sofisticado en la nueva colección otoño-invierno 07-08 de las joyas Elixir de Kailis.Ojos almendrados color avellana, un óvalo perfecto, piel de natural mate y sutilmente dorada, sin imperfecciones. Cabello castaño, suave y brillante. Un metro setenta y cinco de estatura y unas medidas perfectas (90- 60- 85).
Inés Sastre, uno de nuestros iconos morenos más reconocidos nos cuenta cómo se cuida… A sus 34 años (Valladolid, 21-XI-73), continua con el guapo subido y para salir a la calle, dice que sólo necesita cinco minutos para arreglarse, “la crema hidratante, un stick para los labios y un tratamiento de manos” son sus productos indispensables de diario.
“Antes de los aterrizajes, me pongo una mascarilla refrescante en los ojos. Casi no me maquillo, uso simplemente una base, un brillo de labios y un poco de máscara de pestañas”. Aunque si tiene que acudir a una cena más sofisticada intensifica el maquillaje y para vestir, “los colores que mejor me van son el rojo y el turquesa” específica que sólo para esas ocasiones especiales. Su secreto para estar en forma consiste en dormir todo lo que puede y finalizar su ducha diaria con un chorro de agua fría. ¡Efecto tonificante garantizado!
En cuestión de dietas, “como de todo, pero controlo un poco las cantidades. Me tomo todos los días un zumo de limón con miel, o de zanahoria y manzana”.