Es probable que muchos de vosotros hayáis dudado al leer el título de esta entrada si no sabéis qué es el tamarindo o si no tenéis experiencia usándolo en la cocina. Debido a su exotismo y a que no es un ingrediente presente en la cocina española, puede que el tamarindo te suene lejano.
El tamarindo es el fruto de un árbol que tiene su origen en Sudán, en África, pero que por sus cualidades culinarias fue introducido en zonas tropicales de América y de Asia, siendo hoy en día los tamarindos de más calidad los que provienen de México. Crece de forma silvestre en el continente africano, sobre todo en países como Sudán, y en algunos del Cercano Oriente como Omán o Yemen.
El tamarindo es un árbol originario de la sabana africana del cual se obtienen unos frutos que ofrecen una pulpa de sabor dulce y ácido con la que se pueden preparar varias recetas de salsas, bebidas e incluso postres. De sabor agridulce, ácido, picante, intenso y complejo, es ideal para cocinar en platos tanto dulces como salados.
El tamarindo tiene un alto contenido en fibra y vitaminas A, C, E y varias del complejo B. Además, es fuente de hierro, calcio, fósforo, potasio, azufre y magnesio. También ayuda a reducir los niveles de glucosa en sangre, colesterol y la presión arterial.
Dulces de Tamarindo Caseros: Una Receta Sencilla
TARUGOS/DULCES MEXICANOS/LAS RECETAS DE LUPITA
El primer paso para hacer estos dulces de tamarindo casero es retirar la carne del fruto de tamarindo. Para hacerlo, solo tienes que quitar la cáscara y retirar los hilos que recubren la pulpa. Una vez hayas obtenido la carne del fruto, colócala en una olla, vierte el agua y ponla a calentar en el fuego a temperatura media.
Seguidamente, agrega poco a poco dos tazas de azúcar blanco sin dejar de remover en ningún instante. Deja que la masa obtenida se enfríe un poco. Luego, vierte una taza de azúcar, aproximadamente, en un plato, ve formando bolitas de tamarindo con tus manos y cuando estén listas, revuélcalas por el azúcar hasta que queden bien impregnadas. ¡Así de sencillo!
Algunos consejos de personas que ya han preparado esta receta:
- "Lo e intentado pero me quedo aguado alguien me podría decir q me faltó...."
- "Se me hizo muy facil y practica la receta ."
- "Me encanta el tamarindo, soy de Panamá🇵🇦 creci jugando bajo los árboles de Tamarindo y en la época de verano mis padres y vecinos hacian bolitas y la pulpa cocida. Muy facil de hacer. Agua, tamarindo y azucar b."
- "En la receta no especifica cuanto tiempo cocer el Tamarindo."
- "hola amiga como estas estoy haciendo x primara vez el dulc d tamarindo pero como hago para que la mezcla quede pastosa para formar las bolitas?"
Salsa de Tamarindo: Un Condimento Versátil
Una vez procesada la pulpa de este fruto para hacer la salsa que os enseño a continuación, se puede utilizar para condimentar platos de carnes, verduras o pescados, aportando su peculiar sabor y sus propiedades saludables. Para preparar una pasta o salsa de tamarindo solo necesitas medio kilo aproximadamente de pulpa y un poco de agua.
La primera operación es sacar la pulpa de las vainas de tamarindo. Al retirar la cáscara, las semillas (una especie de bolas) vienen unidas por unas hebras o hilo que hay que desechar. Después, abrimos cada uno de los frutos y retiramos las semillas que están en su interior.
Ponemos la pulpa de tamarindo una vez libre de semillas en un cazo y las dejamos unos minutos en remojo, mejor en agua templada para ablandarla. Pasado este tiempo, simplemente debes pelar las vainas, retirar los filamentos y los huesos y aplastarlo la pulpa con la ayuda de un tenedor. Si no estuviesen maduros, cubre de agua en una cacerola y cocina a fuego lento durante 30 minutos, removiendo hasta que se deshagan.
Después, encendemos el fuego y vamos removiendo para deshacer la pulpa, teniendo cuidado de que no se nos pegue. Hay varias posibilidades con esta salsa, para personalizarla o adaptarla al plato que se pretenda cocinar con ella. Si conviene añadir azúcar por su acidez.
Si se va a dar un toque picante al sabor natural intenso y con cierto ácido del tamarindo, se pueden añadir pimientos o chiles y un chorro de limón. Si se va a utilizar en platos de cocina asiática, puedes añadir una o dos cucharadas de salsa soja, que condimentará la salsa de tamarindo y le dará un toque oriental. También puedes añadir citronella o limoncillo finamente picado, o 1/2 diente de ajo si quieres incluir este ingrediente.
Para terminar la receta, trituramos todos los ingredientes con la batidora y pasamos la salsa resultante por un colador para eliminar los restos o grumos que puedan haber quedado, añadiendo agua en su caso si queda demasiado espeso.
Nutriente | Cantidad |
---|---|
Fibra | 5.1 g |
Vitamina A | 30 IU |
Vitamina C | 3.5 mg |
Vitamina E | 0.1 mg |
Hierro | 0.1 mg |
Calcio | 28 mg |
Fósforo | 62 mg |
Potasio | 54 mg |
Magnesio | 14 mg |
Otras Ideas para Disfrutar del Tamarindo
Siempre sienta fenomenal un cuenco de macedonia fresquita. Este es un postre que puede ser muy rico si se hace bien y con fruta natural. Se quita la cáscara de los tamarindos y se ponen a remojar en un poco de agua durante unas horas.
Para sacar la pipa se pasan los tamarindos, ya remojados por un cedazo o un colador, y se reserva Se pone a calentar un poco de agua con azúcar, para hacer un almíbar. No he puesto cantidad, porque hay que hacerla al gusto de cada uno, y en cantidad suficiente como para que quede la fruta bien cubierta.
Y como siempre, después de la teoría, llega la práctica -que es lo que más nos gusta a nosotros-, así que vamos a mostrarte cómo emplear el tamarindo en la cocina.