¿Cuánto tiempo hervir tomates para pelarlos fácilmente? Técnicas y consejos

En muchas recetas, pelar los tomates es un paso esencial. Sin embargo, su piel resbaladiza puede complicar el proceso. Afortunadamente, existen varias técnicas efectivas para facilitar esta tarea. Aquí te presentamos algunos métodos para pelar tomates de manera rápida y sencilla, optimizando tus preparaciones culinarias.

¿Por qué pelar los tomates?

En el mundo de la cocina, hay quienes prefieren añadir el tomate con piel a las ensaladas, ya sea por gusto o por practicidad. Otros, en cambio, optan por pelar el tomate antes de incorporarlo a cualquier plato. Algunos chefs opinan que el tomate sabe mejor sin piel, ya que se funde en la boca más fácilmente. Sin embargo, muchos profesionales de la alimentación recomiendan consumirlos tal como vienen.

La decisión de pelar o no los tomates depende de tus preferencias personales y del plato que estés preparando. Algunas elaboraciones, como las salsas que no se pasan por el pasapurés o la batidora (como la boloñesa o la salsa de tomate clásica), y los acompañamientos de ceviche, guacamole o ensaladas de pasta o arroz, a menudo requieren tomates pelados.

Métodos para pelar tomates

Existen varios métodos para pelar tomates, cada uno con sus ventajas y desventajas. Aquí te presentamos tres técnicas populares:

1. Escaldado en agua hirviendo

El escaldado es una técnica común para aflojar la piel del tomate, facilitando su pelado posterior. Este método consiste en cocinar brevemente los tomates en agua hirviendo y luego sumergirlos en agua fría para detener la cocción.

04 - Cómo ESCALDAR tomates para pelarlos - Curso de cocina básica

Pasos para el escaldado:

  1. Preparación: Llena una cazuela con agua y caliéntala hasta que hierva. Prepara un bol amplio con agua muy fría; puedes añadir cubitos de hielo para asegurar que esté bien fría.
  2. Corte: Haz un corte superficial en forma de cruz en la base de cada tomate. Este corte debe atravesar solo la piel.
  3. Escaldado: Sumerge los tomates en el agua hirviendo durante 20-30 segundos. Si son pequeños, incluso menos tiempo será suficiente.
  4. Enfriamiento: Retira los tomates del agua hirviendo con una espumadera y colócalos inmediatamente en el bol con agua fría y hielo.
  5. Pelado: Saca los tomates del agua fría y separa la piel por donde se ha abierto. Tira de ella para quitarla totalmente.

Consejos adicionales:

  • Asegúrate de que el agua esté realmente hirviendo antes de sumergir los tomates.
  • No dejes los tomates demasiado tiempo en el agua hirviendo, ya que podrían comenzar a cocinarse y perder su textura. Un minuto como máximo es suficiente.
  • Si tienes muchos tomates, es mejor escaldarlos en pequeños lotes para mantener la temperatura del agua constante.
  • Utiliza tomates maduros pero firmes para obtener mejores resultados.

2. Escaldado en el microondas

También puedes escaldar los tomates en el microondas. Este método es rápido y sencillo, ideal para pequeñas cantidades de tomates.

Pasos para el escaldado en microondas:

  1. Preparación: Lava los tomates y haz una pequeña incisión en forma de cruz en la base de cada uno.
  2. Colocación: Coloca los tomates en un recipiente apto para microondas y agrega un poco de agua, suficiente para cubrir los tomates por la mitad. Coloca los tomates con la incisión hacia abajo.
  3. Calentamiento: Calienta los tomates a máxima potencia durante 1-2 minutos.
  4. Reposo: Retira el recipiente del microondas y déjalo reposar durante unos 5 minutos.
  5. Pelado: Utiliza una cuchara para retirar los tomates del agua caliente y procede a pelarlos.

Nota: Los tiempos de cocción pueden variar según la potencia de tu microondas y el tamaño y cantidad de los tomates.

3. Pelado con fuego directo

El fuego directo, ya sea de una cocina de gas o un soplete pequeño, puede ser una herramienta útil para pelar tomates. Esta técnica es rápida y efectiva, especialmente si no tienes tiempo para escaldar los tomates.

Pasos para el pelado con fuego directo:

  1. Preparación: Ensarta el tomate en un tenedor.
  2. Exposición al fuego: Acerca el tomate al fuego, dándole algunas vueltas para que el calor se distribuya uniformemente.
  3. Enfriamiento: Sumerge el tomate en un recipiente con agua fría.
  4. Pelado: Tira de la piel, que ahora se desprenderá fácilmente.

Precaución: Ten cuidado de no quemar el tomate durante el proceso.

Usos de los tomates pelados

Los tomates pelados son ideales para diversas preparaciones culinarias:

  • Salsas caseras: Su textura resulta más suave y uniforme.
  • Gazpacho y salmorejo: La ausencia de piel mejora notablemente la textura final.
  • Conservas caseras y mermeladas: Aportan una consistencia más fina.
  • Salsas para pasta: Como la clásica salsa de tomate.
  • Sofritos y pisto manchego: Son ingredientes esenciales en la cocina tradicional española.

El corte concassé

El corte concassé, aplicado principalmente al tomate, consiste en cortarlo en pequeños cubos de aproximadamente medio centímetro de lado. Para obtener un tomate concassé perfecto, primero es necesario pelarlo utilizando la técnica del escaldado y luego retirar las pepitas de su interior.

Tabla comparativa de métodos para pelar tomates:

Método Tiempo Dificultad Ideal para
Escaldado en agua hirviendo Medio Baja Grandes cantidades, salsas, conservas
Escaldado en microondas Rápido Baja Pequeñas cantidades, uso inmediato
Fuego directo Rápido Media Uso inmediato, pequeñas cantidades

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