La carne de pollo es una de las más versátiles en la cocina, admitiendo infinidad de preparaciones. Una de las formas más comunes y saludables de cocinarla es cociéndola. Se pueden hervir todas las partes del pollo, desde las pechugas, los muslos, contramuslos, alitas o incluso el pollo entero. Dependiendo de la parte a cocinar, el tiempo de cocción varía.
Si bien todos tenemos recuerdos de pollo recocido, seco y poco apetecible, es posible lograr un pollo hervido jugoso y sabroso. A continuación, te presentamos las claves para aprender a hervir el pollo de forma correcta y triunfar con tus platos.
Opciones para cocer pollo
Las opciones de cocinado son muchas, y cada una influye en el tiempo y el resultado final:
- Olla o cazuela convencional
- Microondas
- Thermomix
- Olla GM (olla a presión eléctrica)
- Olla exprés
- Al vapor
1. ¿Cómo cocer pollo en olla o cazuela convencional?
Si te decides por una cazuela convencional, de las de toda la vida, el pollo estará listo en 25-30 minutos. Escoge una olla alta para que entre todo el pollo y no se salga el agua. Preparamos una olla grande y ponemos las pechugas de pollo enteras dentro, vertemos como un litro y medio de agua y cubrimos el pollo, un dedo más o menos. Ponemos la cazuela a hervir a fuego medio durante 15 minutos, y cada 5 minutos le damos la vuelta a las pechugas. Apagamos el fuego y tapamos con la tapadera. Dejamos reposar el pollo en el agua caliente durante 10 o 15 minutos, hasta que esté bien cocido y alcance una temperatura interna de 75º C (165º F). Retiramos las pechugas de pollo del agua y colócalas en una tabla de picar grande. Y también puedes cocer un pollo entero, si decides hacerlo con otras partes que no sean la pechuga, lo mejor es decirle a tu pollero de confianza, que te trocee el pollo para no tener que estar en casa cortándolo.
Para que el pollo hervido no resulte pesado ni desabrido, el secreto es cocinarlo en un caldo bien sabroso. Lo primero es poner a hervir el agua en la cacerola elegida, añadiendo los ajos, la cebolla, el morrón (si se usa), la pimienta y el ramo aromático en el cual -creo- no puede faltar el apio. Usé apio, tomillo y estragón frescos, ataditos. Fuego fuerte hasta que rompa el hervor. Más o menos a los 7' desde que rompió el hervor, el caldo ya tendrá color y sabor. Incorporar el pollo, dejar que retome el hervor y luego tapar y continuar la cocción a fuego suave. Según el tamaño de las presas, aproximadamente a los 25/30', añadir las verduras en trozos no muy chicos.
2. Cocer pollo en microondas
Si tu microondas tiene función de horno, puedes hacerlo tú mismo. Elige un recipiente apto para microondas. Igual que antes, es mejor tener el pollo troceado. Sazónalo y pon las especias que más te gusten, rocíalo con un poco de aceite de oliva, un chorrito de vino blanco, y un limón exprimido.
3. Cocer pollo con Thermomix
Para cocer pollo con Thermomix, debes trocearlo antes para poder distribuirlo en el vaso de Thermomix.
4. Cocer pollo en olla GM (olla a presión eléctrica)
La olla GM es una olla a presión eléctrica que permite controlar la temperatura de forma fácil. Para cocer el pollo en este tipo de olla, también necesitamos trocear el pollo con anterioridad, para que podamos meterlo en el recipiente y para que se haga antes. Por el contrario, si quieres guisarlo, debes sofreír antes los ingredientes en la olla, hay una función ya diseñada en estas ollas para sofreír, después pondremos la carne de pollo troceada y la dejaremos sellar para no perder sus jugos, y ve mezclando con una cuchara de madera, después añade agua o caldo y cubre por completo el pollo. Cerramos la olla y dejamos cocinar en un programa de 15 minutos a 110º C.
5. Cocer pollo en olla exprés
La olla exprés es una de las ollas clásicas, que todos tenemos la mayoría de gente en casa y es la forma para cocer pollo de forma rápida. Esta forma de cocción es muy fácil y no tiene ninguna complicación.
NOTA: Si el pollo está congelado, es necesario descongelarlo con anterioridad.
6. Cocer pollo al vapor
Cocinar al vapor es una técnica mucho más sana, conserva el color y sabor de los alimentos, y además la pérdida de nutrientes es menor, que si lo cocemos en agua. Con esta técnica, puedes realizar dos recetas a la vez, una en el agua que se está cociendo y otra en el cestillo de vapor. Para cocer pollo al vapor, no necesitas una gran olla, ya que puedes hacerlo simplemente en una sartén. Tan simple como colocar agua en el fondo aromatizado a tu gusto, y encima el cestillo de vapor. Cuando el agua comience a hervir, coloca las pechugas en el cestillo, tápalas y baja el fuego al mínimo, en 6-8 minutos tendrás unas pechugas de pollo cocinadas al vapor. Te recomendamos darle la vuelta a la mitad de cocción.
El secreto para un pollo hervido jugoso
El secreto para conseguir que el pollo hervido quede jugoso radica en el proceso de cocción: inicialmente, comenzaremos la cocción con fuego alto para llevar el agua a ebullición. Sin embargo, una vez que alcancemos este punto, es crucial reducir el fuego y permitir que el pollo se cocine a fuego lento.
Aquí tienes una tabla con los tiempos de cocción aproximados según el método:
| Método de Cocción | Tiempo Aproximado |
|---|---|
| Olla convencional | 25-30 minutos |
| Olla exprés | 10-15 minutos |
| Al vapor | 6-8 minutos |
Según el tamaño de las presas, aproximadamente a los 25/30', añadir las verduras en trozos no muy chicos. Para controlar si el pollo está bien cocido puede bastar el verlo, como es el caso de la pata: comienza a desarmarse.
A la hora exacta, saca el pollo y ya lo tienes listo, a unos 63ºC a corazón de producto. Perfectamente jugosos.
Consejos adicionales
- Cuando tengas el pollo cocido, lo mejor es que se enfríe y guárdalo en la nevera. No lo dejes a temperatura ambiente.
- Un pollo cocinado y guardado en la nevera lo podrás consumir hasta 3 días después de haberlo cocinado.
- Aunque en esta receta hemos optado por utilizar pechuga de pollo, puedes adaptarla a tu gusto, empleando otras piezas como contramuslos o incluso un pollo entero troceado. Solo necesitarás ajustar el tiempo de cocción según el tipo de corte seleccionado y tener en cuenta cocinar completamente el pollo.
Lo simple no tiene por qué ser insípido. Con esta receta de pollo hervido, te demostramos que comer saludable y delicioso puede ser fácil y rápido. ¿Cueces o enriqueces? Tú decides.